IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
La Asociación de Corresponsales de Prensa Extranjera en Venezuela (APEX), protesta por las agresiones de que han sido víctimas medios, corresponsales y otros trabajadores de la prensa internacional y venezolana durante la cobertura de los acontecimientos de Febrero en este país, y demanda del Estado que cumpla a cabalidad con las normas y compromisos que en la Constitución Nacional, en las leyes, y en pactos y convenios internacionales, amparan la labor de los periodistas en tiempos de paz y de conflictos.
Denunciamos que varios corresponsales basados en Venezuela o llegados del exterior han sido víctimas de agresiones, malos tratos, hostigamiento, amenazas y robos. Por algunos de estos ilícitos han señalado a fuerzas del orden, y en otros a individuos que integraban grupos irregulares.
Corresponsales de la Red +Noticias de Colombia informaron que fueron sometidos dentro de un vehículo de la Guardia Nacional y despojados de sus teléfonos celulares. Una reportera de la agencia AFP fue despojada de su cámara y su pedido de ayuda fue desdeñado por guardias en la zona del suceso. Un equipo de la televisora CNN fue asaltado y despojado hasta de su equipaje cuando cubría una protesta.
El gobierno ordenó a las operadoras de TV por cable sacar de su grilla a la televisora de noticias NTN24, basada en Bogotá, y anunció que estudia hacer otro tanto con la cadena CNN en Español. Al mismo tiempo, invalidó una credencial de corresponsal que entregó a la colega de CNN en Venezuela e invitó a abandonar el país a otra entrevistadora enviada por esa cadena.
Los corresponsales rechazamos aceptar como normal que debamos trabajar en condiciones de hostigamiento, chantaje y agresiones físicas y verbales. Nos solidarizamos con los colegas de la prensa, radio y TV de Venezuela, también agredidos según decenas de denuncias registradas por sus organizaciones gremiales.
El lenguaje con el que responsables del Estado se expresan del trabajo de la prensa internacional y de sus corresponsales puede ser otra fuente de hostilidad hacia nosotros. El gobierno, por el contrario, debe instruir a sus efectivos de orden público en el respeto debido a los profesionales de la prensa, a sus credenciales, a sus equipos de trabajo.
Los corresponsales no somos parte de las confrontaciones, no somos actores en la conflictividad política de Venezuela, cumplimos con el deber profesional de informar sobre ella.
La Junta Directiva
Caracas, 22 de Febrero de 2014
