El periodista comenzó a recibir las amenazas el 5 de diciembre pasado, luego de que el presidente Chávez lo acusara de ser un asalariado de Estado Unidos, por haber publicado una crónica en la que señaló que el alto mando militar intervino para que Chávez aceptara la difusión de los resultados del referéndum (realizado el 2 de diciembre último), donde ganó la opción de la oposición.
IPYS condena las amenazas y solicita a las autoridades que investiguen el caso y se garantice la integridad del periodista.