IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
El 3 de septiembre de 2015, dos hombres armados irrumpieron en la sede de Radio Selecta 99.7 FM, radioemisora con sede en Achaguas, estado apure, y amenazaron de muerte a Alí Gil, moderador del espacio de opinión “En contacto con el pueblo”, si continuaba informando sobre denuncias que se suscitan en la ciudad. Pedro Rodríguez, director de la estación radial, decidió suspender la emisión del programa, luego de que también recibiera amenazas.
El moderador Alí Gil relató a IPYS Venezuela que dos hombres armados y con el rostro descubierto irrumpieron la sede de la estación Radio Selecta 99.7 FM, durante la emisión del programa “En contacto con el pueblo”, tocaron la puerta del estudio y le exigieron al locutor que se callara, pues si hablaba lo iban a matar.
Los sujetos se comunicaron vía telefónica con la madre del locutor Alí Gil, y le dijeron que si no se callaba lo llevarían en una urna para Mantecal, pueblo ubicado al norte del Estado Apure región suroccidental del país.
“En contacto con el pueblo” era un programa de opinión, transmitido de lunes a viernes de 12 del mediodía a 1 y 35 minutos de la tarde. El moderador y sus invitados hablaban durante hora y media, sobre la situación económica del país, y respondían a las denuncias de los habitantes de la ciudad Achaguas del estado Apure.
Gil aseguró que los trabajadores se resguardaron dentro de la estación y el programa continuó al aire. No obstante, Pedro Rodíguez, director de la estación, suspendió la emisión del programa de opinión, luego de que también recibiera amenazas por parte de estos sujetos.
El moderador introdujo la denuncia respectiva ante el Grupo Antiextorsión y Secuestro Distrito Capital (Gaes) de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), cuerpo de seguridad del Estado.
A los pocos minutos, Gil aseguró haber sido perseguido por dos hombres en motocicleta, y desmintió durante la emisión del programa radial de un colega que le hubiesen disparado.
“Esto forma parte de una persecución política. No he hecho nada malo. Solo he dicho la verdad, estar con el pueblo. Hablarle con la verdad a la gente de Achaguas y Apure sobre cómo este Gobierno acabó con el país”, dijo el locutor.
Esta alerta a la libertad de expresión se enmarca en una amenaza con fines intimidatorios.
El artículo 57 de la República Bolivariana de Venezuela establece que toda persona tiene derecho a expresar libremente sus pensamientos y opiniones a viva voz, por escrito o mediante cualquier medio de expresión sin que pueda establecerse censura.
Acciones intimidatorias, así como las presiones directas o indirectas, ejercidas con el fin de silenciar la labor de los comunicadores sociales violan los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión, de acuerdo con el principio 9 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos.
