IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
El 22 de febrero de 2014, Francisco León, reportero para Radio Fe y Alegría 103.1 FM fue apuntado con un arma larga por funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), cuando cubría un enfrentamiento entre el mencionado cuerpo de seguridad del Estado y un grupo de manifestantes en el sector Altavista, Ciudad Guayana, en el estado Bolívar, región sur-oriental del país. El reportero también afirmó que el funcionario de la GNB que lo apuntó con el arma lo amenazó con detenerlo si no se retiraba del lugar.
Francisco León, periodista que da apoyo a prensa de Radio Fe y Alegría 103.1 FM relató a IPYS que se encontraba cubriendo una marcha pacífica en Ciudad Guayana que inició a las 10 de la mañana y finalizó en el Palacio de Justicia. Después los manifestantes marcharon a distintas zonas de la ciudad para encontrarse nuevamente en Altavista, lugar en la que queda la sede legislativa.
León aseguró que cerca de las 2:15 p.m. funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), comenzaron a reprimir las marchas con bombas lacrimógenas. El reportero pudo describir y contabilizar que había 6 camiones blindados (llamados tanquetas), 1 ballena y 15 efectivos militares motorizados.
Recordó que cinco minutos después, uno de estos camiones pasó a su lado y les arrojaron 2 bombas lacrimógenas a él y 10 personas a su lado. El dispositivo cayó en los pies del reportero, por lo que estas personas comenzaron a correr y al cabo de unos minutos, un funcionario militar, a bordo de una motocicleta, alcanzó al reportero Francisco León y lo apuntó con un arma larga para dispararle un perdigón. Pero el compañero del funcionario le dijo que no disparara en contra del reportero porque trabajaba para la prensa. El hombre decidió disparar en contra de un muchacho que estaba al lado del reportero.
Después de esto hecho, el funcionario que apunto a León le exigió que se retirara del lugar o de lo contrario lo detendría. El reportero decidió irse debido a esta amenaza de detención arbitraria, y también porque el enfrentamiento se tornó violento entre los cuerpos de seguridad del Estado y los manifestantes, cuando estos últimos trancaron las calles
