IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
El 20 de febrero de 2015, el periodista Víctor Amaya renunció a su cargo, como jefe de mesa de Tendencia, Artes y Espectáculos del Grupo Últimas Noticias (Grupo ÚN), conglomerado de medios, luego de que sus superiores solicitaran su renuncia. El periodista considera que los motivos que llevaron a su salida del grupo se deben a su oposición política, pues ya había expresado su descontento en decisiones editoriales que se habían tomado sobre informaciones que fueron publicadas.
El periodista Víctor Amaya relató a IPYS Venezuela el miércoles 18 de febrero de 2015 sus jefes de la Redacción Única lo convocaron a una reunión en la que se le notificó que se había decidido prescindir de sus servicios, debido a una reducción de costos en el Grupo ÚN. Aseguró que lo persuadieron para que negociara su salida del cargo, bajo la figura de renuncia.
Amaya considera que los argumentos que sus superiores le dieron no se justifican con una reducción de costos, pues tuvo conocimiento que durante una reunión sostenida entre la Gerencia de Recursos Humanos, los directivos de los periódicos Últimas Noticias, El Líder y El Mundo, Economía y Negocios, y la delegación sindical del grupo de medios; se contrataría a dos personas en su lugar.
Recordó que anteriormente, varios periodistas, un coordinador de área y un reportero bajo contrato habían salido de la mesa de Redacción, precisamente por reducción de costos.
IPYS Venezuela se comunicó con Jesús Hurtado, periodista y miembro de la delegación sindical del grupo que estuvo presente en la reunión que sostuvo Recursos Humanos con los directivos, quien considera que la salida de Víctor Amaya se debe a una retaliación política contra el reportero que ha expresado su posición frente a decisiones editoriales sobre informaciones de interés público.
“Víctor es un periodista con mucho criterio, y que siempre ha manifestado críticas objetivas en mejoras de los productos. Quizá ese tipo de crítica resultó incómoda para los jefes”, explicó Hurtado.
Por otro lado, Amaya le dijo a IPYS Venezuela que durante la reunión en la que se le conminó a renunciar, se le notificó que su salida no estuvo motivada a su trabajo, pues siempre se hicieron las pautas de trabajo que ordenaban los jefes de mesa.
“Nadie desconoce mi manera de hacer periodismo, entre ellos los jefes editoriales de la empresa. Posiblemente yo era el único que generaba quejas editoriales por los canales regulares. Cada vez que quedaban menos jefes”, aseguró.
Aseguró que a medida que los jefes de área renunciaban o eran despedidos, las exigencias editoriales eran mayores. Por esta razón, el periodista hizo varios reclamos internos de que posiblemente podría verse afectada la calidad de los productos informativos; crítica que hizo con el fin de mejorar las fallas.
El reportero firmó su renuncia el viernes 20 de febrero de 2015, luego de llegar a un acuerdo con la empresa, pues en un principio la Gerencia de Recursos Humanos le había planteado la posibilidad de salid con una liquidación doble. No obstante, el periodista fue persuadido para que renunciara pues posiblemente funcionarios de seguridad privada del diario hubiese podido retirarlo de las instalaciones, como se intentó con el periodista Odell López, el 1 de octubre de 2014.
Este hecho se enmarca en un despido indirecto vinculado a razones informativas y presiones de directivos de medios.
