IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
Ana Karolina Mendoza
Un camión con 40 bobinas de papel llegó a mediodía del miércoles 29 de junio de 2016 a La Verdad. El Complejo Editorial Maneiro le aprobó el despacho al diario tras las gestiones mediante la Cámara de Periódicos de Venezuela.
Luis Pérez, editor jefe, informó a IPYS Venezuela, que el despacho fue de la cuota habitual y que alcanza para un mes, manteniendo las ocho páginas. “Estamos haciendo gestiones para mejorar los canales de comunicación para aumentar la cantidad de bobinas y la frecuencia de los despachos. Tenemos gente en Caracas haciendo esos trámites”.
La Verdad en incertidumbre
Entre el jueves 23 y domingo 26 de junio, el diario no circuló; no se imprimió. Guardaron las bobinas de papel que quedaban para anunciar en la edición por el Día del Periodista, que no circularía a partir del martes 28, que se mudaría por completo a la plataforma digital (www.laverdad.com).
Cinco mil ejemplares fue el último tiraje del segundo diario más importante en Zulia, precisó un trabajador que prefirió mantener anónima su identidad. “Desde principios de mayo no reciben papel”, puntualizó. En esa fecha, Cristi De Matos hizo su último intento por negociar papel con la distribuidora Maneiro y con otros proveedores en Caracas y Valencia, “pero no logró ni una bobina”.
Desde entonces, la incertidumbre es cotidiana en su personal administrativo y periodístico. Sobre todo, el periodístico. En mayo, también, todos los reporteros -redactores y gráficos- y los diseñadores recibieron un taller intensivo de periodismo digital. No les explicaron el para qué del entrenamiento, pero ellos intuían la razón.
El 19 del mismo mes, el personal de rotativa no imprimió el periódico y trancó con cadenas y candados el portón de distribución. “El personal se molestó porque no les cancelaron un dinero que le debía la empresa y además porque los querían obligar a cambiar el sistema de guardias/jornadas: trabajarían solo un domingo al mes y a ellos no les conviene, porque cobran menos dinero en las quincenas”.
La medida se debió a que los domingos disminuyó el tiraje y se necesita menos personal para imprimir y encartar, aseguró la fuente. Hasta entonces el tiraje oscilaba entre ocho mil y 10 mil ejemplares.
Ante la acción del grupo de trabajadores, Marcos Benhamu, presidente editor del rotativo, envío por el sistema de mensajería interna un correo a los trabajadores en el que alegaba que el diario “no circuló debido a la acción ilegal de un pequeño grupo de trabajadores del departamento de Producción”. “Él no da la cara”, señaló la fuente. Quienes se mantienen al frente de la Redacción son Luis Pérez, editor jefe, y Sheyla Urdaneta, jefa de información. Pero, entre ellos, “también hay hermetismo. No sabemos lo que va a pasar”.
Tres veces no circuló La Verdad por problemas sindicales: en 2008, en agosto de 2012 y en mayo de 2016.
El personal de Producción -Rotativa, Encarte, Distribución- no está trabajando, al igual que la plantilla de Ventas y receptoría de Avisos. “Ni siquiera llegan condolencias. La gente quiere pautar en papel”.
El impreso regional luego de tener cinco cuerpos, terminó con dos. En febrero de 2014, fue la primera reducción: de cinco a tres. En ese tiempo comenzaron las trabas para la adquisición de papel. El tiraje también disminuyó de 50 mil a 30 mil ejemplares, y desde entonces fue descendiendo de a poco. Cinco mil fue su último lote.
El numeral tres del artículo 13 de la Convención Americana de Derechos Humanos de la Organización de Estados Americanos (OEA) establece que el derecho de la libertad de expresión no puede ser restringido por vías o medios indirectos, tales como “el abuso de controles oficiales o particulares de papel” para los medios impresos.
