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Presunto dueño de la empresa Rofetrial agredió físicamente a periodista

El 18 de junio de 2015, el periodista Ciro Ramones, conductor del programa radial Espejo Público, fue agredido físicamente a la salida de la emisora 92.7 FM Total, por un hombre que lo amenazó por las denuncias que ha realizado en contra de la Alcaldía de Maturín, por supuestas irregularidades administrativas.

Ciro Romanes aseguró que continuará acciones legales por esta agresión (Cortesía de su cuenta de Twitter @ciroramones)
Ciro Ramones aseguró que continuará acciones legales por esta agresión (Cortesía de su cuenta de Twitter @ciroramones)

 

Ramones contó a IPYS Venezuela que a las 9:00 de la mañana, cuando salió del edificio en donde se encuentra la estación radial en la zona central de la ciudad, fue abordado por un hombre que se identificó como el dueño de la empresa “Rofetrial”, empresa a la que señaló horas antes en su programa.

“Ese hombre se me presentó, me dio un golpe y dijo que se llamaba Luis Trinitario y representaba a la empresa que denuncié en Espejo Público, después me dio otro golpe y me partió la nariz y me dijo que lo hizo para que no lo nombrara más en el programa. De nuevo volvió a golpearme y entonces entré a una oficina de Corpoelec, que está al lado del edificio de la radio”, dijo Ramones.

En las instalaciones de la empresa eléctrica el periodista, con la nariz ensangrentada, pudo resguardarse del agresor, quien intentó entrar al lugar, pero los guardias de seguridad le impidieron el acceso y minutos más tarde Ramones pudo pedir auxilio  a la radio donde buscó protección con algunos compañeros de trabajo.

“Llamé a la radio para que me acompañaran, llamé a la policía municipal, a los funcionarios de la Brigada Ciclística. Trinitario me amenazó y me dijo que la iba a pagar, porque estaban molestos por mis comentarios”, afirmó Ramones.

Además responsabilizó de los ataques al administrador de la Alcaldía. Aunque dijo que no tenía pruebas de ello, aseguró que los golpes se lo dieron porque sus denuncias estaban ligadas a la gestión de este funcionario público.

“Fui a la Guardia Nacional Bolivariana, donde puse la denuncia. En la unidad de Seguridad Urbana me tomaron la declaración, fui a medicatura forense”, agregó el comunicador social quien señaló que continuará las acciones legales por este ataque.

En su cuenta de Twitter @ciroramones añadió: “Seguiré adelante en mi trabajo diario y quienes piensan que esta es la vía para golpear la libertad de expresión y acallar la denuncia de irregularidades, el tiempo les hará caer en cuenta de su equivocación”.

El numeral 5 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA) establece que la presión directa e indirecta sobre cualquier expresión, opinión o información difundida,  a través de los medios de comunicación, debe estar prohibida por la ley.

Además, su artículo 9 señala que los hechos de agresión, amenazas e intimidación a los comunicadores sociales violan los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión. En base a este numeral, IPYS Venezuela rechaza las agresiones en contra de los periodistas afectados y exige al gobierno venezolano que investigue estos hechos, sancione a sus autores y asegure a las víctimas una reparación adecuada.

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