IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
El 28 de octubre de 2015, el diario El Oriental de Monagas reseñó que en la sede de la Universidad Bolivariana de Venezuela-Maturín (UBV) prohibieron el acceso a los periodistas de los diferentes medios de comunicación de la entidad.
La medida, según una fuente extraoficial a la que se refiere este periódico monaguense, se debe a la cobertura que en las últimas semanas han dado a las protestas de universitarios de esta casa de estudios, que se quejaron por la falta de la operatividad del comedor.
“La Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV) ha prohibido que los periodistas locales, continúen publicando informaciones internas sobre esta casa de estudio, puesto que perjudica la credibilidad de este recinto universitario. Solo se admitirán los medios cuando sean convocadas ruedas de prensa, según reseñó una fuente extraoficial perteneciente a esta universidad, que prefiere mantener su identidad en secreto por seguridad”, es la denuncia que se recoge en El Oriental en su página 2.
Entre otras quejas de los estudiantes de la UBV-Maturín, están la falta de aire acondicionado en las aulas, las fallas de luz, del ascensor y de equipos tecnológicos para las exposiciones.
Esta casa de estudios ubicada en la antigua sede de la Brigada de Cazadores, al final de la calle Azcúe de Maturín, fue inaugurada en el año 2005 en el Aló Presidente Número 238 del entonces jefe de Estado, Hugo Chávez. Sus aulas eran conocidas como “inteligentes” porque contaban con herramientas de tecnológicas de primera. Y entre las carreras que oferta está Comunicación Social.
Este hecho representa una limitación de hecho a la cobertura de asuntos de interés público y una medida de censura.
Los artículos 57 y 58 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela establecen el derecho que tienes los ciudadanos de expresar e informar libremente sus ideas u opiniones, a través de cualquier medio de comunicación sin que pueda establecerse censura.
El numeral 5 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA) establece que la presión directa e indirecta sobre cualquier expresión, opinión o información difundida, a través de los medios de comunicación, debe estar prohibida por la ley.
