IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
Un grupo de periodistas que cubre la fuente de Sucesos en Lara (centroocidente de Venezuela) manifestó su inquietud y preocupación, por lo que consideran un “exagerado” resguardo de la escena del crimen por parte de los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), cuando ocurre un homicidio.
El despliegue numeroso de efectivos de la PNB desde el 7 de octubre se ha convertido en una limitante para algunos reporteros de medios impresos y audiovisuales, camarógrafos y fotógrafos, porque aseguran que se les dificulta significativamente tener acceso a los familiares de las víctimas, quienes son sus fuentes primarias para obtener la información fidedigna de los hechos.
Karina Peraza Rodríguez, periodista de la fuente de Sucesos del diario El Impulso, afirmó que considera que la actuación de los policías nacionales en el resguardo de la escena del crimen “nos limita el acceso a la información”.
Relató que el miércoles 10 de octubre de este año se dirigió con su compañero de labores al sector José Félix Ribas, ubicado al oeste de la ciudad, porque les informaron que había una persona asesinada y su cuerpo aún se encontraba en el lugar donde aconteció el hecho.
“Cuando llegamos nos encontramos con un cordón de efectivos de la PNB, lo cual no es usual, pues antes asistían sólo al lugar funcionarios del CICPC o los policías regionales. El reportero gráfico de inmediato comenzó a hacer fotos como siempre, pero un inspector nos informó que no podía tomarlas, porque debíamos pedirle permiso y rendirle cuentas”.
Peraza, quien tiene más de cinco años destacada en esa fuente, asegura que a ella se le dificultó acercarse a las familias para obtener su versión, porque los policías se colocaron en forma de línea cerrada.
Esta misma situación la han vivido colegas del diario La Prensa, quienes también han tenido en dos ocasiones que esforzarse y maniobrar más de lo normal para poder cumplir con su labor de informar.
Jesús Hernández, reportero destacado en la fuente de Sucesos desde hace un año y ocho meses, dijo que el día 12 de octubre se presentó una situación incómoda cuando tuvo que hacer algunas fotos a una persona que asesinaron, en el sector San Francisco, ubicado también al oeste de la ciudad.
“Llegamos al lugar y para mi sorpresa estaban más de 10 funcionarios cuidando. Cuando intenté hacer las fotos me indicaron hasta donde podía llegar y ese día todos los reporteros tuvimos acceso a un solo ángulo para las fotografías”.
Esta situación fue calificada por el fotógrafo como preocupante porque asegura limita su movilidad y creatividad, al igual que la de sus compañeros de otros diarios. Asegura que también afecta a la ciudadanía porque sólo podrá observar la misma fotografía en todos los diarios y eso refleja una sola visión de la noticia.
Comentó que efectivos de la Guardia Nacional y la policía regional actúan de la mima manera, cuando asesinan a un personaje importante, bien sea por el cargo que ocupe o su estatus.
Al ser consultado sobre el trato que recibe por parte de la policía regional, cuando cubre un suceso en el cual la víctima es un efectivo, dijo que actúan de forma agresiva. “Incluso he recibido amenazas porque les molesta que les tomemos fotografías a sus compañeros de labores cuando son asesinados”. Últimamente han matado a muchos policías en la ciudad.
Indicó que las amenazas han sido verbales. En algunas ocasiones los policías le han dicho: “fuera de aquí, porque te vamos a j….”, “por las buenas te estamos diciendo que no tomes más fotos”.
Pero sostuvo que nunca han intentado tapar la lente de la cámara o quitarle algún instrumento de trabajo. Sin embargo, considera las amenazas verbales como algo preocupante.
El periodista respeta la escena del crimen
El editor de Sucesos del diario La Prensa, Héctor Rodríguez, considera que las medidas adoptadas por los funcionarios de la PNB para resguardar la escena del crimen, son necesarias porque es importante desde el punto de vista de la criminalística evitar la contaminación y la pérdida de cualquier evidencia. No obstante, asegura que los periodistas que cubren la fuente de Sucesos por lo general tienen suficiente conocimiento del trabajo que hacen. Por tanto, lo importante es que no se extralimiten para no entorpecer el trabajo y labor de los efectivos del CICPC, que son los encargados de recolectar todas las pruebas que se encuentran en el sitio y hacer el protocolo respectivo para retirar el cadáver del lugar.
“Los colegas saben hacer su trabajo. Considero un poco extraño que se les impida acercarse a tomar las fotografías de algunos detalles como las prendas o cartuchos que algunas ocasiones quedan en el lugar, porque eso siempre se lo han permitido.
Ahora el equipo debe esforzarse más para poder hacer con calidad su trabajo, eso por supuesto representa un aspecto que no podemos dejar de tomar en consideración a la hora de avaluar la labor periodística que hace el equipo en La Prensa.
Recomendó a los efectivos de la PNB “dosificar la intensidad”, en el resguardo de la escena del crimen, porque asegura que tanto ellos como los periodistas pueden cumplir con su labor sin perjudicarse ni ocasionar problemas y en un ambiente tranquilo en el cual prevalezca el respeto. Desconoce si se trata de una política o medida de la PNB.
La periodista Karina Peraza , junto con otros compañeros de los medios de la Prensa y El Informador, conversó de manera cordial e informal con el comisario Nelson Nelles, encargado del grupo de funcionarios en la entidad federal, con el fin de lograr que efectivos les permitan tener acceso al lugar de los hechos, sin tantas limitantes .
