Tejiendo redes

Constructoras de paz en Venezuela

Progresa la participación femenina en La Guaira

En estos momentos de los 25 cargos públicos principales, las guaireñas ocupan 16. Una de esas mujeres es Nélare Bermúdez, Autoridad Única de Salud

Luisana Herice – 27/09/23

Nélare Bermúdez, Autoridad Única de Salud, es una de las 16 guaireñas que ha impulsado la participación femenina en la entidad

A pesar de los desafíos que se pueden encontrar, como la discriminación que aún persiste en ciertos espacios y la desigualdad, la mujer guaireña se ha ido abriendo paso entre las dificultades. Se ha superado, avanzado y ha logrado conquistar importantes escenarios dentro de organizaciones políticas, sociales y gubernamentales, las cuales le han permitido alzar la voz y han demostrado que son capaces y están a la altura del compromiso que se les asigne. 

Es así, como en el Litoral Central, de los 25 principales cargos públicos, 16 son ocupados por mujeres. Desde sus espacios han logrado visibilizar las capacidades, habilidades, intelectualidad y, lo más importante, el rol que tienen dentro de la sociedad. 

Esto, sin contar aquellas mujeres que ejercen cargos secundarios, pero no menos importantes, como concejales, directoras de unidades, subgerentes, entre otras. Así como las que participan en el ámbito comunitario en sus organizaciones de base. Todas ellas son ejemplo fehaciente de las características de la mujer venezolana: aguerridas, resilientes, de vanguardia, solidaria y con mucho amor por su país y familia. 

Las guaireñas han logrado dominar espacios como la Defensoría del Pueblo, la Contraloría Municipal, el Consejo Legislativo, Concejo Municipal, Delegación Municipal del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), Fiscalía Superior de La Guaira, Instituto Regional de la Mujer, Autoridad Única de Salud,  la Inspectoría General de Tribunales de Venezuela, Secretaría General Sectorial de Desarrollo Social, Defensa Pública, Gerencia Regional de Pdval, Cantv  y Mercal, así como varios curules de la Asamblea Nacional.

Una de esas mujeres es Nélare Bermúdez, Autoridad Única de Salud, quien desde hace un año y nueve meses trabaja en función del bienestar e integridad de los habitantes de La Guaira. 

Bermúdez consideró que a través del trabajo que viene realizando en el área de la salud, ha logrado motivar a quienes creen en la transformación del ser humano partiendo del buen trato. «Siempre en búsqueda de soluciones colectivas, problemas estructurales, haciendo más con menos». 

Para Nélare, haber sido víctima de discriminación por ser mujer en algún momento de su carrera, no ha sido determinante, al contrario, se ha convertido en un reto que la motiva a esforzarse más para hacer mejor las cosas «y demostrar que no dependemos de la visión que tengan los demás, sino de como nos autopercibimos». 

La profesional de la salud, afirmó que la participación de la mujer en cargos públicos en la entidad se ha incrementado paulatinamente en los últimos años, y una muestra clara de ello es el sistema público de salud del estado, el cual está conformado por mujeres, quienes ocupan el 80 % de las plazas laborales. 

“Esto es una realidad que se multiplica en las distintas instituciones del estado. Las mujeres tomaron el camino de la superación, del liderazgo, el empoderamiento, la participación y no hay vuelta atrás”. 

Bermúdez asegura que la voluntad y la dedicación de una mujer nadie lo puede cambiar

Indicó que lo que más la llena de satisfacción, es saber que desde sus espacios ha podido visibilizar el papel de la mujer y mostrar su esencia. 

“A pesar de que quien me antecedió también era mujer, una muy brillante a la que admiro y respeto muchísimo, creo que el poder emprender proyectos en radio, dirigir asambleas, consolidar equipos de trabajo, sin caer en la subjetividad me ha permitido ser expresión de una formación y una voluntad distinta”. 

Bermúdez exhorta a quienes aún piensan que las mujeres no están preparadas para asumir cargos públicos que “la voluntad y la dedicación de una mujer no es algo que puedan cambiar. Ser mujer no disminuye la capacidad orgánica de lograr grandes cosas, por el contrario, nos demuestra lo perfecto de la creación de Dios, ser mujer es un privilegio que incluye una capacidad especial para ver integralmente las cosas, discriminar a una mujer por pensar que no está a la altura de un hombre es sencillamente demostrar cuán bajo se es, y lo fácil que puede ser superado”. 

Añadió que muchas son definidas por la forma de verse así mismas y de ver el mundo. “No hay nada que te impida ser tú misma. Más allá de cualquier obstáculo, no permitas que nada ni nadie te haga dudar de ti misma, eres músculo, eres espíritu, eres esperanza, nunca pierdas la fe en lo que crees. El camino para llegar a donde queremos no es fácil, pero está lleno de aprendizajes. En mi caso, no hay nada que quisiera borrar de mi historia», puntualizó la doctora. 

En el espacio cívico 

Historias como la de Bermúdez, responden a que existe una mayor preparación académica, seguridad, empoderamiento y liderazgo femenino, “lo que ha permitido su incorporación efectiva en los diferentes sectores del quehacer nacional. En Venezuela, la participación de las mujeres en el espacio cívico se ha incrementado considerablemente”.

Así lo aseguró la economista Cielo Velandia, presidenta de la Asociación Venezolana de Mujeres (AVM), quien indica que a pesar de todas las circunstancias como la emergencia humanitaria compleja, reconocida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las mujeres venezolanas están presentes, activas y en modo constructivistas en función de los altos intereses del país. 

En el caso de organizaciones femeninas, la Asociación Venezolana de Mujeres es la primera institución de este tipo fundada hace 87 años. Con una visión clara de la mujer líder, protagonista de la sociedad venezolana, son pioneras en exigir derechos civiles y políticos para todas. 

«Un ejemplo claro de la participación de las mujeres en estos espacios, es la elección -luego de 30 años- de la primera mujer presidenta de Fedecámaras, en Carabobo, o de mujeres que han sido presidentas de cámaras de comercios en Maracaibo, Caracas y La Guaira. También, tenemos la primera presidenta de la Academia de Medicina y así como esas, hay muchas que han logrado visibilizar sus conocimientos, capacidades, liderazgo y temple para asumir cargos públicos», aseveró Velandia. 

Asimismo, señaló que es satisfactorio reconocer la labor de muchas organizaciones feministas en ámbitos de salud, educación, derechos humanos y cultura que contribuyen de manera significativa para la preservación de los derechos de todas, incluida la niñez, adolescencia y la protección de la familia en general. 

Detalló que, aunque son minorías las mujeres que ocupan cargos importantes en el país, las estadísticas corroboran que se ha logrado avances destacados: en la Asamblea Nacional (AN) de 277 cargos 33 % son mujeres, en comparación a la Asamblea Nacional Constituyente de 1999, en la que solo participaron 4 mujeres. Mientras que, en el ámbito municipal de 335 alcaldías, 62 fueron conquistadas por mujeres, representando 19 %. Sin embargo, en el caso de las gobernaciones solo 2 de 23, es decir, 9 %, muy por debajo de la meta paritaria de 50 %. 

«Todavía hay mucho por hacer en el ámbito de los partidos políticos y de instancias del poder electoral para promover la participación creciente de mujeres en cargos de elección popular», expresó. 

Según la economista, los esquemas culturales patriarcales, donde la figura del hombre es la preponderante a la hora de mandar, continúa como una de las principales barreras que enfrentan las mujeres al momento de optar por un cargo público. 

Principales obstáculos 

Un informe publicado por el Centro de Justicia y Paz (Cepaz), en marzo de este año, expone que la discriminación y la desigualdad que afrontan las mujeres para el ejercicio de los derechos políticos, especialmente el que se refiere a la posibilidad de ser elegidas y participar en la dirección de los asuntos públicos políticos y demás espacios de toma de decisiones en el país, están entre los principales obstáculos. 

Dicho informe hace referencia a que, «a pesar del discurso público inclusivo sobre la igualdad de género y los derechos de la mujer, tanto del Estado como de los principales líderes políticos y de la dirigencia de los partidos políticos; y a pesar también de las resoluciones para abordar los asuntos relacionados al establecimiento de los criterios de paridad de género en los distintos procesos electorales; en la práctica los números demuestran un histórico desplazamiento de las mujeres en los más altos cargos y espacios de toma de decisiones». 

Según Velandia, debido a lo antes expuesto, muchas mujeres prefieren tener una vida más privada, siendo el hogar su mayor prioridad. Esto ha hecho que se vean alejadas de temas como la corrupción, el escarnio público o, simplemente, el no reconocimiento de sus capacidades por ser mujer.  

«Por eso, se cohíben de tomar una decisión de vida como lo es ser alcaldesa, gobernadora o presidenta del país y como los impedimentos son barreras culturales, deben superarse con preparación, determinación, liderazgo inclusivo y con mucho empoderamiento para lograr niveles de accesos a oportunidades para hombres y mujeres por igual en cuanto al servicio público», dijo.

Una visión internacional  

Es importante destacar que en el ámbito mundial la participación creciente de mujeres en la toma de decisiones en cargos públicos contribuye al avance de las sociedades, a la construcción de paz y al desarrollo sostenible, tal como lo establece la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en el 5.º Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) que habla sobre la igualdad de género, cuyas metas destacan la participación protagónica de la mujer en el espacio cívico, social y familiar. 

Por eso, la presidenta de la AVM insistió en resaltar que sí se han logrado grandes avances en la exigencia de derechos y que se ha conseguido aumentar la participación en todos los sectores que tradicionalmente eran dominados por hombres. “Sin duda, hemos avanzado y ganado espacios, tenemos a mujeres en la NASA, tripulantes de aviones comerciales, campeonas de fútbol, CEO de grandes compañías, legisladoras que buscan favorecer lo relativo a la maternidad y un mayor entendimiento de la corresponsabilidad entre padres y madres”. 

Sin embargo, expresa que en el sector empresarial sigue siendo un desafío el hecho de entender que la maternidad lejos de ser un problema es una oportunidad para las compañías, pues pueden ser más sostenibles.  

“La mujer madre es más productiva, organizada y responsable, humaniza su entorno y crece con la organización. Es importante mencionar que estos logros solo han sido posibles gracias al arduo trabajo realizado por muchas a través de sus cargos en direcciones de Recursos Humanos (RRHH), donde han sensibilizado a sus directivas y hoy día las organizaciones inteligentes tienen claro que los seres humanos son más productivos cuando son felices e interdependientes”. 

Para la especialista en participación y temas de género, la sociedad ha evolucionado a la hora de hacer efectiva la igualdad de oportunidades entre hombre y mujer. No obstante, resalta que hay temas muy relevantes, como la igualdad salarial, teniendo como resultado una brecha del 23 % en promedio, a nivel mundial. También están las brechas significativas por trabajo doméstico no remunerado, la paridad en cuanto a la participación en procesos electorales, en espacios gremiales, entre otros.  

Considera que la independencia económica, es la clave para el avance de la agenda común de las mujeres, esto podría representar cambios estructurales que pueden adoptarse en la educación a todo nivel y el desarrollo armónico donde hombres y mujeres, en igualdad de condiciones y derechos, deben ser garantes de la paz. 

Para Velandia la combinación de educación, liderazgo y tecnología, así como los movimientos mundiales y los ejemplos de las mujeres de Latinoamérica, han sido punta de lanza para que tengan mayor participación en los espacios cívicos. 

La mujer guaireña ha logrado avanzar, superarse y posicionarse

“Por ejemplo, en la política, mujeres en cargos presidenciales como Michelle Bachelet, en Chile; Vilma Rousseff, en Brasil; Laura Chinchilla, en Costa Rica; Cristina Kirchner, en Argentina, entre otras, que independientemente de sus posiciones políticas, dan muestra de lo posible y que las sociedades van abriendo estas oportunidades sin discriminación alguna. Estas mujeres son historias de grandes desafíos, luchas y convicciones que son ejemplo para muchas que deseen incursionar en el campo del servicio público”. 

 

Agregó que: “En cuanto a la tecnología, nuestra generación ha sido testigo de excepción, de lo vertiginoso de los cambios tecnológicos y el poder comunicarnos abiertamente. A través de las redes hemos conocido la vida inspiradora de Malala Yousafzai, en Pakistán, luchando por el derecho a la educación de las niñas que casi le cuesta su vida, o el liderazgo de Angela Merkel, en Alemania, los movimientos Me Too. Es así como la existencia de comunidades globales digitales, nos permiten observar tendencias, estudios, investigaciones, políticas públicas y, sobre todo, las realidades de países que progresan y también otras realidades que nos avergüenzan, situaciones que no deberían ocurrir en este siglo como las guerras, a pesar de todo esto, siempre las mujeres tendrán un rol protagónico y es un gran propósito para seguir avanzando en la construcción de sociedades justas, libres y prósperas”.