Tejiendo redes

Constructoras de paz en Venezuela

“Sugar daddy”, una modalidad de estafa digital  

En Instagram hay falsos perfiles que ofrecen sumas que no bajan de los 1000 dólares, pagar deudas, operaciones, alquileres y estudios.

Por María Angela Arellano – 16/06/23

Foto: Pexels

Viajes, pagos de operaciones quirúrgicas, de estudios, de alquileres, son algunas de las ofertas que suelen colarse en mensajes virtuales que salen de perfiles desconocidos, con pocos seguidores y recién creados, con el interés de favorecer estafas. Las víctimas son mujeres jóvenes y adolescentes.

La trama inicia cuando la usuaria recibe un mensaje directo (DM) aparentemente inofensivo en Instagram que, en su mayoría, lo envía un hombre maduro.

Luego, vienen una serie de mensajes y conversaciones para seducir a la mujer. Los que captan se muestran ricos, atractivos, con poder. Los estafadores se hacen amigos de sus víctimas en redes sociales, así como apps y plataformas de citas y, posteriormente, intentan continuar la conversación en canales alternativos, como aplicaciones de mensajería instantánea.

Una vez profesan su amor, tratan de extraer dinero de la víctima, generalmente utilizando excusas como emergencias médicas o boletos de avión para encontrarse.

También le van sacando información y, cuando creen tener el control, le ofrecen pagar sus deudas lanzando, de buenas a primeras, sumas que no bajan de los 1.000 dólares.

Hablan inglés, piden fotos y apoyo emocional

Karen Puerta, de 22 años, estudiante universitaria, mantuvo conversaciones durante varios días con uno de estos perfiles. Ella aseguró que solo hablaban inglés y que el hombre al otro lado de la línea constantemente le pedía fotos y apoyo emocional a cambio de dinero.

Puerta contó que de mensajes directos de Instagram migraron a la plataforma de WhatsApp. “Luego de unos días el ‘sugar daddy’ me pidió la cuenta de PayPal para hacerme una transferencia. Yo debía el alquiler de mi residencia que era alrededor de $50 y él me dijo que me lo pagaba, le pasé mi cuenta de PayPal y me depositó 5.000 dólares, una cantidad gigante para mí. Posteriormente, al llegar el dinero me pidió que hiciera una transferencia de 100 dólares en bitcoin (criptomoneda) por intereses para poder retirar lo que tenía en mi cuenta”, añadió la estudiante.

El llamado “sugar daddy” le pasó el link de una página para que hiciera la compra del bitcoin y así pudiese retirar los 5.000 dólares enviados a su PayPal.

Karen no accedió, pero el sujeto seguía muy insistente con el retiro del dinero y la compra de la criptomoneda. Al final, decidió bloquearlo y no continuar el contacto porque se dio cuenta que se trataba de una estafa.

“Si llegó a insinuarme que le enviara nudes en medio de las conversaciones, pero no directamente. Una vez que hizo el pago, me insistió en hacerme una llamada, pero allí decidí cortar la comunicación porque lo vi sospechoso”, aclaró Puerta.

La estudiante aseguró que esto le ha pasado cerca de tres veces y ha decidido bloquear al instante los mensajes que le llegan a su Instagram con esas “propuestas” que ofrecen dinero a cambio de intercambiar fotos, video o realizar llamadas.

Propuestas en línea

La Red de Constructoras de Paz realizó, durante el mes de abril de este año, una encuesta a 10 mujeres y hombres jóvenes universitarios a través de WhatsApp. Siete de las personas consultadas aseguraron haber recibido “propuestas” de mensajes directos de Instagram ofreciendo dinero por enviar fotos, videos o simplemente para charlar.

Uno de los encuestados, Manuel* comentó que “a mí me han llegado ese tipo de mensajes. Una vez bromeé con mi pareja y le mostré lo que me decía el ‘suggar daddy’ desde un perfil que no tenía publicaciones y pocos seguidores. Sí conversé un rato y luego de ofrecerme 5.000 dólares a la semana me dijo que tenía que enviarle fotos atrevidas para aumentar el ingreso. La verdad, en su momento lo bloqueé, pues sé que esto se puede prestar para una estafa, pero hay muchos adolescentes que fácilmente pueden caer en estas situaciones en medio de sus necesidades”.

Mónica*, quien también respondió la encuesta, reiteró que nunca ha respondido esos mensajes, pero destacó que todos los días en su bandeja hay entrada de mensajes de Instagram tiene al menos 1 o 2 propuestas de un “sugar daddy”, ofreciéndole hasta 1.000 dólares por responder preguntas.

“Yo nunca les respondo pero estoy tan habituada, me pasa casi a diario. En ese mensaje donde me ofrecían 1.000 dólares aparecía la foto como de un trío algo así, me asusté y no respondí”, reiteró.

Mónica añadió que en otras ocasiones le han escrito pidiéndole fotos en traje de baño y la acosan con video llamadas si no responde. Ya no le pasa tan seguido porque ha decidido bloquear de inmediato cuando le escriben este tipo de cosas en sus redes sociales.

“Yo nunca les respondo pero estoy tan habituada, me pasa casi a diario. En ese mensaje donde me ofrecían 1.000 dólares aparecía la foto como de un trío algo así, me asusté y no respondí”, reiteró.

Mónica añadió que en otras ocasiones le han escrito pidiéndole fotos en traje de baño y la acosan con video llamadas si no responde. Ya no le pasa tan seguido porque ha decidido bloquear de inmediato cuando le escriben este tipo de cosas en sus redes sociales.

Modalidad popular

Las relaciones de hombres maduros y mujeres muy jóvenes siempre han existido. Sin embargo, el término “sugar daddy”se hizo moda y, más allá de tener estos encuentros implicaciones morales y legales, se vincula a las estafas virtuales cada vez más comunes a través de las redes sociales.

Como dijimos al principio, se trata de perfiles falsos denominados “sugar daddy” o “sugar mommy”, cuyo fin es robar dinero y extraer información personal de los usuarios.

Luis Serrano, coordinador de la ONG Redes Ayuda, dijo que los sugar daddy o las sugar mommy hacen el mismo tipo de scam, es decir, la misma forma de estafa.

“Sucede mucho, por ejemplo, con el ‘Hola soy María’ que es bastante famoso en Venezuela, estrategia que busca el intercambio de divisas, pero que en sí es una forma de estafa. Otra es cuando algunas personas se hacen pasar por alguien conocido, y simulan estar en una situación de emergencia. Engañando de esa manera obtienen dinero de la víctima”, añadió Serrano. 

Estefanía Mendoza, directora de la ONG Mulier, recomendó que uno de los primeros pasos para tener seguridad digital y evitar ser víctima de estafa es hacer una búsqueda de la imagen usada por ese perfil con otros nombres y en otras cuentas. 

“El surgimiento de la inteligencia artificial puede modificar imágenes, crear videos, e incluso generar audios imitando la voz de una persona, por lo tanto deben asegurarse de que las personas que tengan agregadas en sus redes sociales sean reales y que sean con quienes han compartido en la vida real, eso evitará que sean manipuladas a través de perfiles falsos”, añadió la activista.

Mendoza agregó que, por la emergencia humanitaria compleja que atraviesa el país desde 2015, las mujeres, niñas y adolescentes no tienen las mismas oportunidades para sostenerse económicamente. “En situaciones de vulnerabilidad, pueden ser estafadas con mayor facilidad debido a que acceden a estas trampas movidas por una necesidad”, destacó. 

La activista reiteró que es importante que se trabaje en la construcción de referentes, para enseñar y motivar a las niñas y a las adolescentes a construir un proyecto de vida, “que las haga menos propensas a la exposición de estafas o de trata de personas”.

“Es importante que se tomen medidas de seguridad al usar redes sociales ya que estas son utilizadas para mantener contactos con quienes están lejos, y muchas veces se generan dinámicas de explotación sexual, extorsión y amenazas para obtener información personal y comprometedora. El uso de contenido explícito autogenerado aumentó mucho durante la pandemia”, alertó la defensora.

Seguridad en la red

Serrano destacó que no hay cifras específicas de delitos informáticos en Venezuela, ya que los informes de las autoridades no están disponibles. Empresas como Microsoft han detectado un aumento en estas irregularidades, pero las estadísticas locales son imprecisas. A pesar de esto, la gente puede denunciar si es víctima en la División de Delitos Informáticos del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalística, Cicpc.

 Y recomendó, además, algunas formas de proteger las cuentas de Instagram:.

    1. Cambiar el correo electrónico asociado a esta red social.
    2. No permitir a otras personas el acceso a las contraseñas de Instagram, Twitter o Facebook. Quien quiera transferirte lo hará y ya, no es necesario dar las claves de seguridad para poder tener dinero a través de la plataforma de PayPal. Esta técnica la aplican para robarte tus datos y, por ende, el acceso a tu cuenta.
    3. Las personas no andan regalando dinero así como así en internet e, incluso, las señales de alerta deben comenzar por el tipo de contacto, casi siempre son personas que hablan otro idioma, en este caso el inglés. El especialista instó a los usuarios a analizar estos perfiles antes de responder cualquier mensaje.

“Desde Redes Ayuda hacemos una labor de concienciación, hacemos campañas y constantemente estamos haciendo foros o somos invitados a estos espacios donde conversamos y educamos a la ciudadanía , sobre cómo no caer en este tipo de situaciones que, cuando las evaluamos de fondo, casi siempre son las mismas, pero la táctica es lo que cambia, es decir, algunas veces es sugar mommy o sugar daddy, otros son hola soy María”.

También son personas que se hacen pasar por entes gubernamentales o por algún tipo de empresas privadas con cierta credibilidad o cierta reputación.

*Nombres de los encuestados reservados para proteger su identidad.