Por: Luis Martínez
El estado llanero es un desierto para sus habitantes. Todos los apureños tienen alguna dificultad para acceder a informaciones oportunas, sobre todo las regionales. Si lo dividimos por grado de dificultad, tenemos que 76,75% de los habitantes de esa población tienen pocos medios de información para acceder a noticias de su región y 23,25% viven en un total desierto con un solo medio para informarse. No hay periódicos y tampoco hay televisión de señal abierta.
La imagen que se tiene de Apure es de las llanuras infinitas que en una mitad del año se pueden cabalgar sin problemas y cuando llega la temporada de lluvias, el llanero es especialista en salvarse de las inundaciones. De lo que no se ha podido salvar es que el estado se haya convertido en un desierto informativo. De los siete municipios que lo conforman, todos tienen algún problema de información y tres tienen la situación más grave (desierto informativo).
Apure, en pleno siglo XXI, parece revivir las escenas de la novela Doña Bárbara (1929) donde el enfrentamiento entre el atraso y la modernidad vuelven a toparse. En este caso hablamos del derecho a la información, una parte fundamental ligada a la libertad de expresión, que es un derecho humano universal.
Apure sólo ocupa 8,35% del territorio venezolano y es uno de los estados con menos población en el país (ocupa el puesto 19 de los 23 estados, el Distrito Capital y las islas de las regiones que conforman Venezuela), con 630.568 habitantes.
Dividiendo en dos la situación de acceso a la información en Apure, el porcentaje se divide así: 76,75% de los apureños (483.928) viven en un desierto informativo moderado y 23,25% (146.640) viven en un total desierto informativo.
La política de censura y asfixia que la revolución ha aplicado sobre todo en los últimos años ha causado que cada vez sea más difícil acceder a informaciones veraces y oportunas. Apure es una muestra de cómo el cierre de emisoras de radio, el cierre forzado de periódicos por falta de papel, hace que cada vez sea más difícil poder saber lo que ocurre en el estado. La investigación realizada por el IPYS señala que solo se reportaron siete medios de comunicación que cubren las noticias regionales (en total se mencionan 13 medios y ninguno de ellos es un periódico o un canal de televisión de señal abierta).
De los siete municipios que lo componen, tres de ellos (Biruaca, Muñoz y Rómulo Gallegos) son desiertos de información. Del total de medios referidos, cuatro son emisoras de radio y tres son medios digitales, y con los problemas de conexión que tiene el país hace mucho más difícil la posibilidad de informarse rápidamente con la pluralidad normal de una democracia.
Los datos suministrados también indican que cinco de estos medios regionales son privados y dos son comunitarios. Además destaca que no se refirió ni un solo periódico que se imprima en la región.
Por: Luis Martínez
El estado llanero es un desierto para sus habitantes. Todos los apureños tienen alguna dificultad para acceder a informaciones oportunas, sobre todo las regionales. Si lo dividimos por grado de dificultad, tenemos que 76,75% de los habitantes de esa población tienen pocos medios de información para acceder a noticias de su región y 23,25% viven en un total desierto con un solo medio para informarse. No hay periódicos y tampoco hay televisión de señal abierta.
La imagen que se tiene de Apure es de las llanuras infinitas que en una mitad del año se pueden cabalgar sin problemas y cuando llega la temporada de lluvias, el llanero es especialista en salvarse de las inundaciones. De lo que no se ha podido salvar es que el estado se haya convertido en un desierto informativo. De los siete municipios que lo conforman, todos tienen algún problema de información y tres tienen la situación más grave (desierto informativo).
Apure, en pleno siglo XXI, parece revivir las escenas de la novela Doña Bárbara (1929) donde el enfrentamiento entre el atraso y la modernidad vuelven a toparse. En este caso hablamos del derecho a la información, una parte fundamental ligada a la libertad de expresión, que es un derecho humano universal.
Apure sólo ocupa 8,35% del territorio venezolano y es uno de los estados con menos población en el país (ocupa el puesto 19 de los 23 estados, el Distrito Capital y las islas de las regiones que conforman Venezuela), con 630.568 habitantes.
Dividiendo en dos la situación de acceso a la información en Apure, el porcentaje se divide así: 76,75% de los apureños (483.928) viven en un desierto informativo moderado y 23,25% (146.640) viven en un total desierto informativo.
La política de censura y asfixia que la revolución ha aplicado sobre todo en los últimos años ha causado que cada vez sea más difícil acceder a informaciones veraces y oportunas. Apure es una muestra de cómo el cierre de emisoras de radio, el cierre forzado de periódicos por falta de papel, hace que cada vez sea más difícil poder saber lo que ocurre en el estado. La investigación realizada por el IPYS señala que solo se reportaron siete medios de comunicación que cubren las noticias regionales (en total se mencionan 13 medios y ninguno de ellos es un periódico o un canal de televisión de señal abierta).
De los siete municipios que lo componen, tres de ellos (Biruaca, Muñoz y Rómulo Gallegos) son desiertos de información. Del total de medios referidos, cuatro son emisoras de radio y tres son medios digitales, y con los problemas de conexión que tiene el país hace mucho más difícil la posibilidad de informarse rápidamente con la pluralidad normal de una democracia.
Los datos suministrados también indican que cinco de estos medios regionales son privados y dos son comunitarios. Además destaca que no se refirió ni un solo periódico que se imprima en la región.