Unicef pide acciones
contra desnutrición infantil

26 enero, 2018

El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia advierte que la crisis económica empeora el acceso de los niños venezolanos a alimentos, medicinas y atención

El título del comunicado que Unicef difundió desde Nueva York no deja lugar a dudas: “Venezuela: aumenta la prevalencia de la desnutrición infantil en medio de una crisis económica cada vez más profunda”. El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia señala que pese a la falta de estadísticas oficiales divulgadas por el gobierno venezolano, los datos de estudios de organizaciones independientes, como Cáritas Venezuela, confirman que la falta de acceso a alimentos, medicinas y atención está ocasionando graves secuelas en la población infantil.

“La organización hace un llamamiento para que se agilice la puesta en marcha de una respuesta sistematizada contra la desnutrición, basada en la información desglosada y coordinada entre el Gobierno y aliados”, dice el documento publicado el 26 de enero por Unicef, una de las instituciones multilaterales que no ha ocultado bajo un discurso diplomático sus preocupaciones por el desempeño estatal en la atención de la población infantil. La desnutrición aumentó en Venezuela de 10 por ciento a 13 por ciento entre 2004 y 2016 según el informe Estado de la Seguridad Alimentaria y la Nutrición en el Mundo elaborado en 2017 por el Fondo de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Los datos oficiales más recientes citados por Unicef los emitió el Insituto Nacional de Nutrición de Venezuela en 2009 y según ellos solo 3,2 por ciento de los niños del país presentaban peso inferior a la estatura correspondiente. Los estudios de Cáritas Venezuela, sin embargo, demuestran una correlación de más de 15 por ciento en un conjunto de parroquias urbanas a las que le hacen seguimiento continuamente.

“El Gobierno Bolivariano de la República de Venezuela ha implementado medidas para mitigar el impacto de la crisis sobre la nutrición de los niños, incluyendo la provisión de paquetes mensuales de comida a precios asequibles para las familias más vulnerables, así como ayudas en efectivo y a través del refuerzo de los servicios de valoración nutricional y de recuperación. Pero hace falta más para revertir el preocupante deterioro en el bienestar de los niños”, señala la organización.

“UNICEF está colaborando con el Ministerio de Salud, el Instituto Nacional de Nutrición, y las organizaciones sociales para reforzar y ampliar la vigilancia nutricional a nivel comunitario; proporcionando servicios de recuperación nutricional a través de sus aliados; apoyando cinco centros de maternidad prioritarios en el Distrito Capital, promoviendo la lactancia materna y orientando a las familias sobre crianza y sobre dónde pedir ayuda en caso de ser necesario, entre otros servicios”, añade el comunicado. Ipys Venezuela en alianza editorial con El Pitazo publicó en junio pasado una investigación en la que confirmó las fallas de funcionamiento de los servicios de recuperación nutricional estatales, en los que deberían ser internados los niños con desnutrición grave para su total rehabilitación.