CIDH cuestiona a Venezuela por desprotección de niños

14 febrero, 2018

El organismo interamericano presentó un informe sobre la situación de los derechos humanos en el país y analiza el acceso de niños a la salud y a la alimentación.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) difundió el informe Situación de los Derechos Humanos en Venezuela en el cual la organización analizó, entre otros puntos, el desempeño del Estado en materia de protección de la salud y la alimentación de la población infantil. En el documento se expresa inquietud por las fallas de acceso a medicinas y servicios apropiados de atención y por las muertes recurrentes. “Resulta especialmente preocupante la situación de niños, niñas, adolescentes y mujeres embarazadas”, se señala en un párrafo del informe. En otro se añade lo siguiente: “En relación con la mortalidad infantil resulta preocupante la muerte de neonatos”. Más abajo se expresa angustia por las versiones sobre “aumento exponencial” de muertes de pequeños por desnutrición.

La CIDH citó las estadísticas oficiales según las cuales en 2016 murieron 11.466 infantes, 30 por ciento más que en año anterior. Los datos habían sido mantenidos en secreto por el Ministerio de Salud hasta que la entidad los divulgó en un vínculo de su página web en mayo de 2017. Antonieta Caporale, titular del despacho, fue destituida poco después que las cifras fueron reveladas con la consecuente controversia. En las estadísticas se deja constancia además de que 756 parturientas fallecieron, lo que supuso un salto de casi 66 por ciento con respecto a la mortalidad materna en el mismo período.

Con respecto a la muerte de neonatos, la CIDH citó una serie de denuncias, que constituyen apenas un puñado de ejemplos en comparación con las que se han hecho públicas en los últimos dos años en Venezuela. “Durante el 2016, se reportó que en el primer trimestre del año, 82 neonatos habían fallecido en el estado de Zulia y 71, en el estado de Táchira, lo cual significó un incremento del 25 por ciento en relación al mismo periodo de 2015. Este escenario continuó en el 2017. De acuerdo a la información recibida, solo en agosto murieron 19 neonatos prematuros en el Hospital Central de Maturín, y de enero a julio de 2017, murieron 100 neonatos en el Hospital Universitario de los Andes por infecciones nosocomiales”.

En Huérfanos de la Salud, proyecto de investigación de Ipys Venezuela en alianza editorial con El Pitazo, se realizó un reportaje que muestra cómo las fallas de los equipos, la escasez de medicinas y la falta de médicos neonatólogos ha afectado la capacidad del Estado para enfrentar la mortalidad neonatal, uno de los puntos centrales destacados por la CIDH.

La comisión además recordó las acciones de Cecodap, organización dedicada a la defensa de los derechos infantiles, que hace dos años solicitó a un Tribunal de Protección del Niño, Niña y Adolescente de Caracas que adoptara medidas preventivas anticipadas para obligar de manera inmediata al Estado a garantizar la provisión de medicinas para los infantes, entre los más afectados por la situación de escasez existente en Venezuela. La petición fue negada en todas las instancias, incluido el Tribunal Supremo de Justicia.

La situación de la alimentación también fue considerada en el documento de la CIDH. “Preocupa profundamente a la CIDH que durante los primeros meses del 2017, se haya denunciado que diez niños menores de dos años murieron por desnutrición y que informaciones recientes indiquen que el número habría seguido aumentando exponencialmente, sin que existan datos oficiales sobre la cuestión. Entre los factores que hace que los NNA más pequeños sufran especialmente las consecuencias del desabastecimiento, se encuentran la escasez y altos costos de productos esenciales para su adecuada nutrición como la leche y sus derivados, alimentos de alto valor biológico, cereales, complementos vitamínicos y suplementos alimenticios”.

El informe de la CIDH fue difundido el 12 de febrero