domingo , abril 28 2024

La verdad en cuarentena | Día Mundial de la Libertad de Prensa

Equipo de Monitoreo de Libertades Informativas de  IPYS Venezuela/
Marianela Palacios Ramsbott 
  • Este 3 de mayo IPYS Venezuela recuerda la importancia del periodismo como un ejercicio fundamental de la libertad de expresión e información, y reitera la responsabilidad de los Estados de garantizar que los periodistas y medios de comunicación cumplan con su labor de informar a la sociedad en un entorno libre, independiente y plural, especialmente en medio de la emergencia de salud pública generada por la Covid19

  • En solo 49 días, entre el 13 de marzo y el 30 de abril,  los cuerpos de seguridad provocaron 27 casos de agresiones a la libertad de prensa, y las detenciones arbitrarias se ubicaron como los ataques más graves y numeroso en tiempos de cuarentena social

  • IPYS Venezuela realizó un monitoreo a 51 medios de comunicación tradicionales durante 4 días y concluyó que predominó la escasez informativa relacionada con la cobertura de la pandemia del Coronavirus en el país, pues los contenidos sintonizados se limitaron a transmitir comunicaciones oficiales por parte del gobierno de Nicolás Maduro a través de cadenas de radio y televisión, o declaraciones de los principales funcionarios del gabinete oficial.

En Venezuela las vulneraciones a los medios de comunicación, periodistas y trabajadores de la prensa en su derecho a la libertad de expresión y acceso a la información no tienen vacuna. En el marco del Día Mundial de la Libertad de Prensa, este 3 de mayo, el Instituto Prensa y Sociedad, IPYS Venezuela, expresa su preocupación por la escalada de censura y de las violaciones a la libertad de expresión e información que se registraron entre enero y abril de 2020, y que sumaron un total de 146 casos de limitaciones a estas garantías. Preocupa que estas acciones fueron ejecutadas principalmente por los cuerpos de seguridad del Estado y grupos de simpatizantes oficialistas. 

Solo en los primeros cuatro meses de 2020, 71 hombres y 56 mujeres fueron limitados en su derecho a buscar y difundir información de interés público, de los cuales, al menos 121 de las víctimas son periodistas quienes en medio de su ejercicio profesional, fueron impedidos o agredidos por ejercer su labor y exigir sus derechos. IPYS Venezuela también registró 18 casos de detenciones arbitrarias entre enero y abril que cercenaron la libertad de forma temporal, a 23 periodistas, cinco familiares y un defensor de derechos humanos vinculado con el periodismo.

Durante los meses de enero y febrero del año 2020, los ataques hacia la prensa se vieron vinculados a las coberturas informativas en el Palacio Legislativo, sede del Parlamento, y en actividades vinculadas con Juan Guaidó, como en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía y en el estado Lara, pero estos incidentes aumentaron en marzo, justamente desde que se decretó el Estado de Alarma por la pandemia de la Covid-19 en el país, el 13 de marzo. A partir de ese momento las fuerzas públicas, bajo el mando de Nicolás Maduro, ejercieron su poder con el objetivo de silenciar la información y promover el desconcierto en la ciudadanía sobre temas de interés público.

Aunque la Carta Magna y la Ley orgánica sobre Estados de Excepción establecen que el acceso a la información es un derecho que no debe ser limitado, aún en estados de emergencia, las fuerzas públicas continuaron abusando de su poder para impedir que la prensa venezolana ejerciera sus derechos de informar, investigar, opinar e incluso preguntar sobre asuntos relacionados con la crisis de salud causada por el coronavirus.

En solo 49 días, entre el 13 de marzo y el 30 de abril, los cuerpos de seguridad provocaron 27 casos de agresiones a la libertad de prensa, y las detenciones arbitrarias se ubicaron como el plato fuerte del Estado en tiempos de cuarentena social. 

Estas medidas abusivas ascendieron a 15 casos que privaron a 20 trabajadores de la prensa en los estados Miranda, Vargas, Cojedes, Táchira, Guárico, Apure, Delta Amacuro, Zulia y el Área Metropolitana de Caracas.

Información oficial sin contraste

La cobertura de la Covid19 en Venezuela también fue expuesta a contagios de desinformación y falta de pluralidad. IPYS Venezuela hizo una revisión durante cuatro días de marzo y abril a 43 emisoras en el Área Metropolitana de Caracas, donde destacaron dos estaciones de Amplitud Modulada (AM), medios que en su mayoría cuentan con alcance nacional a través de circuitos radiales conectados en diferentes estados del territorio. Además, se analizaron las transmisiones de ocho canales televisivos de cobertura nacional como Venevisión, Tves, Televen, VTV, FANB TV, ANTV, Globovisión y Telesur, los cuales representan los medios de comunicación que mayor penetración tienen en todas las zonas del país.

En este análisis predominó la escasez informativa relacionada con la cobertura de la pandemia del Coronavirus en el país, pues los contenidos sintonizados se limitaron a transmitir comunicaciones oficiales por parte del gobierno de Nicolás Maduro a través de cadenas de radio y televisión, o declaraciones de los principales funcionarios del gabinete oficial.

A lo largo del monitoreo a estos 51 medios de comunicación tradicionales(1) , IPYS Venezuela pudo concluir que las alocuciones vinculadas con las cifras de coronavirus en el país no fueron realizadas por fuentes médicas especializadas, en cambio, fueron abordadas desde una mirada más política que concentró las declaraciones en tres principales voceros oficiales: Nicolás Maduro, Jorge Rodríguez y Delcy Rodríguez. Además de contar con la participación de otros dirigentes distribuidos en el territorio nacional como los gobernadores de los estados Lara y Miranda, Carmen Meléndez y Héctor Rodríguez, respectivamente.

Durante ese tiempo, solo pudo ser registrada una corta intervención por parte de Carlos Alvarado, encargado del Ministerio de Salud, ente principalmente responsable de los temas de salud pública en el país, quien también pertenece a la Comisión Presidencial para la Prevención y Control del Coronavirus, creada por Nicolás Maduro para atender el Estado de Alarma. Además de una alocución de Lesvia Muro, presidenta del Instituto Nacional de Higiene Rafael Rangel (INHRR), ente encargado de procesar las pruebas médicas de Coronavirus en el país. Ambas declaraciones fueron ofrecidas en medio de la misma cadena nacional dirigida por Nicolás Maduro el jueves 16 de abril.

Las campañas de prevención promovidas desde el gobierno y desde los medios privados y comunitarios, fue otro elemento presente al momento de revisar los contenidos de emisoras como Radio Fe y Alegría 105.7 FM, Actualidad 90.3 FM del grupo de emisoras de Unión Radio, La X 89.7 FM, Pacífica 90.7 FM, Radio Perola 92.3 FM, al igual que las emisoras del sistema de medios públicos como Radio del Sur 98.5 FM, RNV 91.1 FM, Alba Ciudad 96.3 FM, entre otras. Destacó también la retransmisión en vivo del programa “360” de Venezolana de Televisión (VTV) por medio de algunas emisoras públicas como Makunaima Karina 104.9 FM, RNV Activa 103.9 FM, Radio del Sur 98.5 FM, YVKE Mundial 550 AM y otras.

La actuación de voceros especializados en el tema de la salud y la participación de otros actores sociales fue otro elemento ausente. Lo mismo ocurrió con la ejecución de ruedas de prensa donde pudieran participar periodistas de diversos medios de comunicación, eventos en los que se ejecutaban estas restricciones incluso antes del inicio de la cuarentena. Los funcionarios del régimen de Nicolás Maduro solo brindaron en este período del Estado de Alarma comunicaciones oficiales y entrevistas a medios de comunicación abiertamente oficialistas.

Organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos expusieron sus recomendaciones a los Estados para llevar a cabo las medidas excepcionales sin recurrir en violaciones a los derechos humanos.

El miércoles 29 de abril la alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, expresó su preocupación por la “falta de transparencia” de Honduras y Venezuela en el manejo de la crisis de sanidad generada por el coronavirus, e insistió en la necesidad de impulsar las guías de trabajo que tiene la ONU para que todos los gobiernos puedan enfrentar la pandemia. 

Bachelet también se refirió a la Comisión de su oficina en Venezuela, y dijo que el objetivo es poder proporcionar coordinación técnica al gobierno de  Nicolás Maduro y así poder “estar cerca de la gente y sus familias que han denunciado ser víctimas de violaciones a los derechos humanos”. El 9 de abril la alta comisionada instó a los gobiernos a aumentar el acceso a información y estadísticas precisas ya que “la transparencia es primordial y puede salvar vidas en una crisis de salud. Además instó a “poner fin a cualquier cierre general de Internet y telecomunicaciones”.

Por su parte, La CIDH a través de la Resolución 01/2020, recomendó a los gobiernos promover el derecho de acceso a la información pública sin limitaciones en el marco de la emergencia por la Covid19, además de pedir garantías a los gobiernos para evitar las detenciones arbitrarias en medio de los decretos de Estados de Excepción.

La opacidad agudiza la desinformación (#)

En Venezuela, el virus de la desinformación se expande más rápido que el Coronavirus Covid19. Las cifras oficiales sobre la pandemia que ha manejado la administración de Nicolás Maduro durante esta crisis, siguen en entredicho.

En un Comunicado conjunto, emitido por el Relator Especial sobre la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y de expresión de la ONU, David Kaye; Representante de la OSCE para la Libertad de los Medios de Comunicación, Harlem Désir; y el  Relator Especial de la CIDH para la Libertad de Expresión, Edison Lanza, se advierte sobre la necesidad de que los gobiernos promuevan y protejan el acceso y la libre circulación de la información durante la pandemia y destacan la relevancia de proporcionar información fiable para contrarrestar la desinformación: 

“Compartimos la preocupación de que la información falsa sobre la pandemia podría provocar preocupaciones en materia de salud, pánico y desorden. En este sentido, es esencial que los gobiernos y las empresas de Internet aborden la desinformación por sí mismos en primer lugar proporcionando información fiable. Esto puede hacerse en forma de mensajes públicos sólidos, apoyo a los anuncios de servicio público y apoyo de emergencia a la radiodifusión pública y al periodismo local (por ejemplo, mediante anuncios de salud del gobierno)”.

Venezuela no ha escapado a esta otra faceta de la pandemia. En marzo, cuando los voceros oficialistas aseguraban que en Venezuela había 143 casos de contagio, la Academia Venezolana de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales (AVCFMN) hablaba de más de 800. En aquella ocasión, los científicos de la AVCFMN advirtieron también que las cifras divulgadas por el Ejecutivo nacional no sólo eran imprecisas sino atípicas, si se comparaban con lo sucedido en otros países. 

Los académicos resaltaron que una tasa de recuperación del 27% en el día 9, a partir del caso inicial -como anunciaron las autoridades- resultaba atípica en función del tiempo de recuperación medio de 12,3 días estimado en Wuhan y de acuerdo con el estudio “Características epidemiológicas y clínicas de 99 casos de neumonía provocada por el nuevo coronavirus 2019 en Wuhan, China”, citado recientemente por The Lancet

“Esta cifra posiblemente oculta imprecisiones en la definición de caso que deben revisarse. Dado que se ha demostrado que la vigilancia y la difusión precisa de información al público desempeñan un papel clave en el diseño e implementación de intervenciones que minimizan las tasas de mortalidad, creemos que es necesario realizar cambios con urgencia para garantizar una vigilancia y un informe confiables”, destacaron los académicos en ese informe.

Además, a juicio de los académicos, el sistema de salud venezolano se había derrumbado en los últimos años y la mayoría de los hospitales ni siquiera estaban equipados apropiadamente para manejar pacientes con Covid19 en la actualidad. “Los hospitales carecen de agua, desinfectantes o desinfectantes o equipos necesarios para proteger al personal médico de la infección y minimizar el contagio intrahospitalario. 

El 28 de marzo, el 60% del sistema de atención médica carecía de mascarillas o jabón. Mientras que los funcionarios del gobierno anunciaron que Venezuela tenía una capacidad instalada de 1.213 camas con UCI para ayudar a pacientes críticos, una red independiente de médicos, trabajadores de la salud y epidemiólogos presentó un saldo de sólo 84 camas con equipo de UCI. Si el 10% de los pacientes con Covid19 desarrollarán síntomas graves que requieren hospitalización en las unidades UCI, 840 casos positivos serán suficientes para abrumar al sistema de salud”, acotaron.

Al cierre de esta edición (29 de abril 2020), en Venezuela se registraron 331 personas contagiadas y 10 fallecidos, de acuerdo con el más reciente reporte oficial dado por el Poder Ejecutivo nacional.

En Venezuela, tras la llegada de la Covid19, el virus de la desinformación se ha expandido a una velocidad mayor que el de la propia pandemia. 

Y por eso vale la pena analizar una serie de casos puntuales, que han sido verificados ya por medios especializados en verificación de hechos y de datos tales como CotejoInfo, Efecto Cocuyo, y EsPaja de Transparencia Venezuela, y que han permitido distinguir mejor las verdades de las mentiras y media verdades en los discursos públicos que se han viralizado en redes sociales, Internet y otras plataformas de difusión. 

  1. Censura epidemiológica

La periodista Fiorella Agrello, del portal de factchecking CotejoInfo, informó que “Venezuela tiene alrededor de cuatro años viviendo la censura en temas de salud pública debido a la ausencia de información epidemiológica. 

El boletín epidemiológico semanal que antes producía el Estado venezolano fue suspendido bajo orden de Nicolás Maduro, para evitar la difusión de cifras públicas de enfermedades que venían en aumento durante su administración, como la difteria o malaria, y la reaparición de epidemias en territorio nacional que habían logrado controlarse efectivamente en el siglo 20”.

“El último boletín epidemiológico publicado se registró en 2016 (aunque previo a ello ya existían lapsos de censura). Por esa fecha, el endocrinólogo y experto en epidemiología, perteneciente a la organización Médicos Unidos por Venezuela, Marcos Lima, explicó que la censura inició producto de un incremento de 34,4 % en los casos de malaria en América, con alta incidencia en la zona del estado Bolívar en Venezuela, siendo esto un retroceso histórico en el país. Enfermedades como el AH1N1, chikungunya, zika o hasta el mismo dengue, han tocado al país y el silencio por parte de las autoridades para informar el número de casos ha sido una constante”, recordó Agrello.

  1. Cifras oficiales no cuadran

En marzo, cuando el gobierno de Nicolás Maduro admitió públicamente la existencia de casos de Coronavirus en Venezuela, se aplicaron 1.779 pruebas, según lo reportado por la oficina de Naciones Unidas en el país.

El vicepresidente sectorial para Comunicación, Turismo y Cultura, Jorge Rodríguez, respondió a eso señalando que el organismo multilateral debía “registrar los números reales” y que en verdad se habían aplicado “1.779 pruebas por cada millón de habitantes”.

Si damos por ciertas esta cifra dada por Rodríguez y si efectivamente el 8% de las pruebas dieron positivo, como también informó el propio gobierno en una declaración pública, se deriva de eso que ocurrieron entonces 2.454 contagios de la Covid19 en Venezuela y no los 144 que el gobierno de Nicolás Maduro notificó al país en marzo, como alertó CotejoInfo al evaluar esos datos.

  1. Coronavirus se cura con Interferón = Falso

El periodista y experto en ciencias políticas, Andrés Cañizales, señaló en un artículo publicado en Diario de Cuba, que otra línea de desinformación en Venezuela ha sido insistir en que el Interferón Alfa 2B, fabricado en Cuba, es eficaz para el tratamiento del Coronavirus. 

“La televisión gubernamental de Venezuela se ha hecho eco de una supuesta recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre este fármaco cubano. Incluso  en la pantalla oficial se ha mostrado a Luis Herrera, asesor científico y comercial del grupo industrial estatal cubano BioCubaFarma, refiriéndose a este medicamento. Herrera afirmó en el canal Telesur que “su uso evita que los pacientes con posibilidades de agravarse y complicarse lleguen a ese estadio, y finalmente tengan como desenlace la muerte. También Nicolás Maduro, en una alocución para referirse a la Covid19, mencionó las bondades del interferón cubano.” Sin embargo, en el sitio web oficial de la OMS no se recomienda el uso de este fármaco.

“Los científicos venezolanos reaccionaron, pero con una voz que no tuvo el mismo impacto, ya que no tuvieron acceso a la televisión en Venezuela para advertir sobre esta campaña de desinformación. La Academia Nacional de Medicina venezolana, presidida por el doctor Leopoldo Briceño-Iragorry, junto con la Comisión de Bioética, emitió un comunicado en el que alertan sobre el uso del interferón por no tener demostrada utilidad terapéutica y seguridad”, añadió Cañizales.

El portal Efecto Cocuyo, a través de su unidad de factchecking, se hizo eco de esta advertencia de la Academia Nacional de Medicina sobre el uso del Interferón Alfa 2B para tratar la Covid19: “Se trata de una afirmación sin pruebas de su utilidad terapéutica y seguridad a nivel nacional en internacional” 

“En el mes de febrero, el gobierno cubano aseguró que varios ciudadanos chinos lograron curarse del Covid19 usando esta medicina, afirmación que nunca hicieron las autoridades chinas en sus reportes diarios sobre el avance de la enfermedad”, concluyeron los fact checkers de Efecto Cocuyo

  1. ¿Guerra biológica contra China?

Las campañas de desinformación en medio de la pandemia también han incluido versiones sobre presuntas “guerras biológicas” creadas por países para perjudicar a sus enemigos en el tablero de juego geopolítico global. 

Uno de los primeros países en poner a circular la versión de que se trataba de una “guerra biológica contra China” fue Rusia, y varios jefes de Estado de sus principales aliados en el escenario internacional, entre ellos Nicolás Maduro, se hicieron eco de esa línea de comunicación. También lo hizo el comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria de Irán, como lo reportó el medio de comunicación ruso RT.

La declaración de Nicolás Maduro fue la siguiente: “Hay análisis en el mundo que demuestran que el Coronavirus puede ser una cepa creada para la guerra biológica contra China. Ya son muchos los elementos que se ven en el análisis mundial y hay que alzar la voz, tocar la campana, alertar que no sea el Coronavirus Covid19 un arma de guerra que se esté utilizando contra China y los pueblos del mundo”. 

Versiones de esta naturaleza se difundieron rápidamente a través de la red de medios internacionales que recibe sus directrices en Moscú, como Sputnik News, quien publicó incluso que “no es de extrañar que el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Zhao Lijian, sugiriera que posiblemente el paciente cero en la actual pandemia global haya venido de Estados Unidos. “Posiblemente los militares de EEUU han traído la epidemia a Wuhan”. 

Deutsche Welle (DW) dejó en evidencia esto también el pasado 30 de marzo, al recordar que la propia Sputnik News fue la que sugirió en enero que el virus había sido creado en un supuesto laboratorio de la OTAN. 

“Esta fue la primera noticia falsa sobre el virus de fuentes rusas registrada por EUvsDisinfo, el proyecto del Servicio Europeo de Acción Exterior que ha venido vigilando las campañas de desinformación rusas en 15 idiomas desde 2015. Según los analistas de EUvsDisinfo, el falso informe sobre la producción del Coronavirus en biolaboratorios estadounidenses, también fue difundido por el servicio árabe de Sputnik, entre otros. La actitud hostil de los medios árabes hacia Estados Unidos los hizo particularmente susceptibles a asumir como verdadera esta teoría de la conspiración: docenas de sitios web árabes adoptaron la supuesta noticia, incluyendo un sitio falso de la BBC”.

Deutsche Welle informó también que los expertos de EUvsDisinfo observan un flujo constante de desinformación por parte de los medios de comunicación rusos o relacionados con el Kremlin y que las noticias falsas siguen el mismo patrón una y otra vez: “fue el Pentágono”, “las élites gobernantes están detrás del coronavirus”, “Estados Unidos se quiere asegurar la hegemonía”, “un nuevo orden mundial tiránico es el objetivo”.

“Un documento interno de la Unión Europea, al que la agencia de noticias Reuters tuvo acceso, habla de una amplia campaña de desinformación. Rusia quiere aumentar el efecto del coronavirus creando pánico y sembrando más dudas. Sindicaciones que Moscú negó inmediatamente. Los medios de comunicación cercanos al Kremlin están difundiendo teorías contradictorias. A veces la pandemia es un engaño, luego se pintan de nuevo escenarios apocalípticos del colapso del sistema de Schengen, la disolución de la OTAN o incluso, el colapso de los países bálticos. En una crisis en la que la confianza y la cooperación son esenciales, los expertos de EUvsDisinfo concluyen que la máquina de desinformación del Kremlin está tratando de socavar la solidaridad en Occidente” en esta coyuntura, concluyó la agencia de noticias alemana.

Aunque ya se ha descartado esta posibilidad, Donald Trump reconoció en ruedas de prensa estar investigando a fondo el origen del virus, incluyendo la posibilidad de que haya sido el resultado de un mal manejo en un laboratorio chino, y evaluando la posibilidad de exigir a China indemnizaciones para las víctimas y el impacto económico que traerá la pandemia. 

“No estamos contentos con China. No estamos contentos con toda la situación porque creemos que podrían haberla detenido desde su origen (…) Podría haberse detenido con rapidez y no se habría propagado por todo el mundo (…) Hay muchas maneras en las que puedes hacerlos responsables. Como sabrán, estamos llevando a cabo investigaciones muy serias”, dijo Trump desde la Casa Blanca.

Fadela Cahib, vocera de la OMS, respondió a las declaraciones de Trump en estos términos: “Toda la evidencia que tenemos sugiere que el virus tuvo un origen animal y no sufrió manipulaciones genéticas. Muchos investigadores han podido analizar las características genéticas del virus y no han encontrado indicaciones que apoyen la idea de que el virus se haya construido en un laboratorio”. 

  1. Remedios caseros previenen el virus = Falso

No fueron pocos los voceros del oficialismo y medios de comunicación e información controlados por el gobierno de Nicolás Maduro que pusieron a circular versiones sobre cómo prevenir el coronavirus con remedios caseros. Incluso Maduro y algunos ministros del gabinete y líderes de primera línea de la revolución socialista del siglo 21, lo hicieron. Recomendaban medicamentos caseros como gárgaras de agua y el uso de yerbas naturales, a través de infusiones de malojillo (citronela) y sauco, como una manera de prevenir el virus. Ambas son noticias falsas.

Las periodistas Ysabel Viloria Sánchez y Verónica Bastardo, de Cotejo.Info, desmintieron también la versión de que la hidroxicloroquina con azitromicina cura la Covid19, que se difundió velozmente a través de WhatsApp.

De acuerdo con la OMS, en la actualidad “no existe un tratamiento efectivo aprobado” y los  que están siendo administrados en estos momentos “se encuentran aún en fase experimental». Tampoco existen aún vacunas para prevenir este virus.

“Anteriormente CocuyoChequea ya había desmentido que el agua o el té caliente ayuden a prevenir o curar la Covid-19, al igual que tomar preparaciones con ajo o limón, un té de hierbas medicinales, mantener la garganta húmeda o que el calor disminuyera su propagación”, reportó la Unidad de FactChecking del portal digital Efecto Cocuyo.

  1. Café cura la Covid-19 = Falso

Otra noticia falsa que se viralizó con facilidad en los dos últimos meses por whatsapp fue la versión de que el café curaba el coronavirus. 

“De acuerdo al texto compartido por Whatsapp, Wenliang había descubierto que las sustancias metilxantina, teobromina y teofilina, contenidas en el café, fueron parte de los archivos de una investigación en la que proponía un tratamiento que disminuiría el impacto de la enfermedad en el cuerpo humano. La principal metilxantina es la cafeína, que la planta de café produce para alejar insectos. Asegura el texto que les están sirviendo tazas de café a pacientes en Wuhan con muy buenos resultados”, narran los periodistas de Efecto Cocuyo que evaluaron el caso.

Esa verificación de hechos y datos fue parte de un esfuerzo global de 41 organizaciones especializadas en verificación coordinadas por la Red Internacional de FactChecking (IFCN) para atender la pandemia de desinformación sobre la Covid19.

El médico chino Li Wendaliang “no concluyó que el café cura la Covid19. Por otra parte, aunque las metilxantinas son un grupo de fitoquímicos que sí están presentes en el café o el té, esas sustancias no tienen propiedades curativas sobre el coronavirus, por lo tanto la información es falsa”, concluyeron los factcheckers de Efecto Cocuyo.

  1. Ibuprofeno empeora infección de Covid19 = Engañoso

La unidad de verificación de hechos de Transparencia Venezuela, EsPaja.com, constató que la versión de que los medicamentos antiinflamatorios (Ibuprofeno, cortisona y aspirina) empeoran la infección de la Covid19 es engañosa. 

“La afirmación fue hecha el sábado 14 de marzo de 2020 por el ministro de Sanidad de Francia en su cuenta de Twitter en idioma francés— y despertó controversia y alarma: el ibuprofeno es un antiinflamatorio suave que está en las despensas de primeros auxilios de casi todas las familias para aliviar dolores genéricos. Francia es, en este momento, el séptimo país con más positivos confirmados de coronavirus (5.937, con 127 víctimas fatales hasta el lunes 16 de marzo al mediodía). Debido a la investidura de la personalidad que emitió el tweet, las réplicas en redes sociales no se hicieron esperar (…) Sobre la base de los datos científicos de los que se dispone en este momento, la información divulgada por el ministro francés es engañosa”. A esa misma conclusión llegó el portal de verificación de hechos español Maldita.Es y puede acceder a los detalles del caso haciendo clic sobre este enlace: Maldita.es

(#) Marianela Palacios Ramsbott elaboró el capítulo La opacidad agudiza la desinformación para IPYS Venezuela


(1) Ficha técnica: 

El monitoreo de medios tradicionales fue realizado durante cuatro días de los meses de marzo y abril a 43 estaciones radiales y ocho canales de televisión.

43 estaciones radiales: Adulto Joven Radio 88.1 FM, Radio CNI, 87.5 FM, FM Center 88.9 FM, Barutaima 89.3 FM, La X 89. 7 FM, Actualidad 90.3 FM, Pacífica 90.7 FM, RNV 91.1 FM, Candela 91.9 FM, Radio Perola 92.3 FM, 92.9 Tu FM, Clave 93.3 FM, Melodía Stereo 93.5 FM, Hot 94.1 FM, Fusion Stereo 95.1 FM, 95.4 FM, Radio Miraflores 95.9 FM, Alba Ciudad 96.3 FM, 96.7 FM, 97.6 FM, Rumba 98.1 FM, La Radio del Sur 98.5 FM, Advanta Radio 98.7 FM, Éxitos 99.9 FM, Cadena Digital FM 100.7 FM, Radio Libre Negro Primero 101.1 FM, Kys FM 101.5, 101.8 FM, Salsa Caribe 102.3 FM, 103.5 FM, 103.7 FM, RNV Activa 103.9 FM, Melao 104.1 FM, 104.5 FM, Makunaima Karina 104.9 FM, Planeta 105.3 FM, Fe y Alegría 105.7 FM, Fiesta 106.5 FM, Oyeven 106.9 FM, La Mega 107.3 FM, Onda 107.9 FM, YVKE Mundial 550 AM y Radio RCR 750 AM

8 canales de televisión: Venevisión, Tves, Televen, VTV, FANB TV, ANTV, Globovisión y Telesur

Días de Monitoreo: Martes 24 y jueves 26 de marzo, y martes 14 y jueves 16 de abril en el bloque horario de las 12:00 pm hasta las 2:00 pm y 6:00 pm hasta las 8:00 pm

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