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Funcionario de la Guardia Nacional Bolivariana intimidó a periodista cuando cubría colas de supermercados

El 04 de febrero del 2015, Vanessa Arenas, periodista del portal web “Efecto Cocuyo”, fue víctima de intimidación por parte de un funcionario de la de Guardia Nacional Bolivariana, cuerpo de seguridad del Estado, mientras realizaba la cobertura de las colas en la cadena de supermercados “Día a día”, intervenido en días pasados por el gobierno nacional.

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La comunicadora relató a IPYS Venezuela que la cobertura fue realizada en tres sedes de la cadena desde tempranas horas de la mañana. El trabajo periodístico que hizo en la sede del  Unicentro el Marqués y en la sede de la avenida Baralt transcurrió en total normalidad. Sin embargo, fue cuando se encontraba en las instalaciones  de la avenida Andrés Bello que uno de los agentes de seguridad entró en escena.

Es necesario destacar que Arenas se encontraba realizando periodismo de inmersión, es decir, se hizo pasar como un cliente en cola ante los guardias que se encontraban en la puerta, para poder obtener las  entrevistas de los clientes regulares a quienes sí les contaba acerca de verdadera identidad.

“Llegué a las 11:30, hice las entrevistas y ahora tenía que tomar las fotos”, indicó la reportera. Para lograrlo, la periodista, sin identificarse como tal, se apartó del grupo de personas que esperaban para acceder al local y desde la entrada, tomó fotos a la cola, sin enfocar a los guardias o los rostros de las personas que allí se encontraban.

“Entonces un guardia se me acercó y me preguntó qué estaba haciendo, que allí no podían tomarse fotos”, explicó la reportera. “¿Cuál es el artículo que dice que tomar fotos aquí está prohibido?”, respondió. El argumento en defensa del agente de seguridad fue que existía una alta probabilidad de que esas fotos fueran alteradas por la dama y publicadas en redes sociales, dando una información errónea.

“En ese momento, las personas se comenzaron a salir de la cola para defenderme”, dijo la periodista. Al guardia, la comunicadora le dijo que ella desconocía la prohibición y  así, corrió hasta alcanzar el primer transporte público que vio para salir de aquella situación. Es necesario destacar que no hubo agresiones físicas o verbales y que a pesar del incidente, el trabajo periodístico se realizó a cabalidad.

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