Colomina conduce un programa de opinión en Unión Radio y es columnista del diario El Universal. En los panfletos, que son firmados por miembros del colectivo “La Piedrita”, declaran a la periodista como “objetivo de guerra” y la acusan de promover, a través de su programa, el magnicidio contra el presidente Hugo Chávez.
“La Piedrita” es un grupo de un sector popular ubicado al oeste de Caracas. En los últimos meses se ha atribuido ataques similares contra las sedes del canal Globovisión, del diario El Nuevo País y contra el edificio donde vive Leopoldo Castillo, conductor del programa “Aló Ciudadano” que se transmite por Globovisión.
La periodista no se encontraba en su residencia al momento del ataque, pero su hija le avisó lo que ocurrió.
En marzo de 2002, Colomina recibió medidas de protección emitidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA, para garantizar su vida, tras recibir amenazas telefónicas.
En junio de 2003, Colima sufrió un atentado cuando lanzaron artefactos explosivos contra su automóvil. La CIDH solicitó al Estado garantizar la integridad de la periodista. Esas recomendaciones fueron ratificadas en julio de 2006, tras constatar el incumplimiento de las mismas por parte del Estado.
IPYS manifiesta su preocupación por esta acción que pone en riesgo la integridad de la periodista, de sus familiares y vecinos.