Las activistas pudieron captar la atención de aproximadamente 90 pacientes, entregaron volantes y alertaron sobre los diferentes tipos de violencia

Giovanna Pellicani – 13/03/24

¿Cómo se manifiesta la violencia obstétrica?, fue el foco principal del conversatorio que el grupo de Mujeres Constructoras de Paz, ofreció en la sala de consultas gineco obstetra del Hospital Felipe Guevara Rojas de El Tigre, al sur del estado Anzoátegui.

Durante la actividad, el equipo de Mujeres Constructoras de Paz atendió a cerca de 90 pacientes que acudieron al lugar, y en el 45 % de los casos, de acuerdo a los testimonios que pudieron levantar, pudieron conocer que sufrieron algún tipo de violencia obstétrica.

Por segunda vez consecutiva, las activistas y defensoras de los derechos humanos de la mujer, aportaron herramientas para que las embarazadas conocieran de qué manera son vulnerables a las posibles agresiones por parte del personal de salud antes, durante y posterior al parto.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define esta agresión como “toda acción u omisión por parte del personal médico y de salud que dañe, lastime, denigre o cause la muerte a la mujer durante el embarazo, parto y puerperio”.

Rebeca Rodríguez,  una de las voceras principales en la zona sur del estado Anzoátegui, contó que a través de conversatorios, volanteos y papelógrafos han ayudado a las mujeres a identificar sus derechos, sensibilización que se ha extendido al público en general.

“Muchas son las que agradecen lo aprendido porque desconocen este tipo de acciones y también cuándo han sido víctimas”, resaltó.

En el reciente conversatorio, lograron identificar algunos casos como el de Mayerlín Duarte, quien acudió al centro asistencial en busca de atención para su segundo embarazo, pero con temor de ser humillada nuevamente.

“Mi primer bebé nació en un hospital de hospital de Caracas, y allí fue traumático porque ese día los médicos estaban atendieron tres partos al mismo tiempo, yo en ese momento pensé que me trataban así por el colapso del momento, pero hoy entiendo que cuando me gritaban que pujara y que dejara el drama yo estaba siendo víctima de violencia obstétrica”, resaltó.

“La actividad fue realizada por petición de los mismos especialistas del Hospital de El Tigre y allí nos han permitido hablar, concienciar y ayudar a las mujeres que asisten al lugar a identificar los tipos de violencia. Estamos agradecidas con la receptividad”, resaltó Rebeca.

La OMS sostiene que el parto para las mujeres mediante debe tener un enfoque basado en los derechos humanos, esto incluye la prestación de una atención respetuosa de la maternidad que mantenga la dignidad, privacidad y confidencialidad de la mujer, le permita tomar una decisión informada y recibir apoyo continuo durante todo el trabajo de parto y el parto, y garantice la ausencia de malos tratos.

Tomando como referencia estos parámetros,  las activistas y defensoras de los derechos humanos en la entidad hicieron un llamado a detener a tiempo (prevenir) y a denunciar cada uno de los casos de los que sean víctimas; al tiempo que aseguraron que las jornadas de charlas continuarán y se entenderán a otros centros asistenciales de la entidad, de acuerdo con las metas establecidas en el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS), específicamente la 3, que exhorta a los Estados a garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades.