IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
El 24 de agosto del 2015, Gabriela Aguilar, periodista del portal web, El Pitazo, fue agredida verbalmente por un teniente de la Guardia Nacional Bolivariana, de nombre A. González, mientras realizaba la cobertura de una protesta de trabajadores de la ensambladora de carros “Chery”, en Tejerías, Edo. Aragua.
Tras aceptar la solicitud de Daniel Ibarra, operador de la empresa, de cubrir la manifestación, Aguilar llegó a la sede de la ensambladora sin un camarógrafo u otro medio que la acompañara. En seguida, registró los testimonios de diversos trabajadores quienes denunciaron irregularidades y demandaron mejoras laborales, con su teléfono móvil.
“Cuando estoy haciendo las tomas, salen cuatro funcionarios de la Policía de Aragua y un GNB, quienes se atravesaron en la toma, pero no los grabé, corté la toma allí”, dijo la corresponsal. Sin embargo, uno de los efectivos de la policía pidió a periodista, en tono agresivo, que se acercara a donde él se encontraba para explicarle que lo que ella hizo, presuntamente, estaba en contra de la ley. “Usted cometió un delito, usted me grabó”, fueron las palabras del funcionario.
Aguilar, quien no se encontraba visiblemente identificada como periodista, le explicó al efectivo de seguridad que se encontraba realizando su labor de comunicar la situación y que no cometió ningún delito. “Borra el video”, dijo un policía. También solicitó la cédula de la dama para verificar sus datos. La acompañó hasta el carro para buscar el documento de identificación tras lo cual le solicitó información tal como su dirección de residencia. “Muéstrame el video”, pidió el oficial. La comunicadora accedió desbloqueando su móvil dándose para que observara la grabación en la que aparece sólo un brazo del personaje, al final de la toma. “Lo borró y revisó todos los archivos de mi teléfono”, aclaró la reportera.
Al devolver el teléfono a su dueña, Aguilar llamó a su jefe, César Bátiz, director de El Pitazo, a quien explicó lo que sucedía mientras era escoltada de nuevo junto al teniente González. “Vete de aquí, esto es propiedad privada y lo que hiciste es un delito”, aclaró el alto funcionario. Tras la respuesta negativa de su interlocutora, el teniente insistió: “Mami, vete de aquí”.
“Yo no me voy a ir de aquí”, expresó la periodista al tiempo que exigía respeto. “Voy a llamar a una fémina para que te ponga en cintura”, amenazó González. Al darse cuenta de la situación, los protestantes intervinieron para defender a Aguilar.
“Ya sabes”, fue la última advertencia del teniente antes de entrar a la empresa.
