jueves , mayo 2 2024

Alerta IPYSve | Corresponsal española en Venezuela sufre dos ataques en menos de una semana

Esther Yáñez, periodista española que trabaja en el país, denunció haber recibido amenazas por parte de Lechuguinos, un portal web partidario de la administración de Nicolás Maduro, y funcionarios de la Policía de Caracas el 26 y 29 de julio, respectivamente.

Yáñez informó sobre la agresión del medio de comunicación a través de su cuenta en la red social Twitter, donde compartió una imagen en la que se muestran mensajes intimidatorios hechos desde el perfil de Lechuguinos dirigidos a la corresponsal. Los tweets decían “voy por ti” y “no ocultaré nada, sin lloradera”.

Posteriormente, el medio publicó un artículo en donde la califican como una delincuente por supuestamente haber intentado ingresar a una pauta de Nicolás Maduro con una credencial falsa del canal Telesur, medio del que la corresponsal dijo que fue despedida por diferencias ideológicas con sus superiores y aseguró que, en el momento de su despido, entregó su acreditación, por lo que es imposible que la haya usado en ocasiones futuras.

De acuerdo a la periodista, estos ataques se deben a su cobertura y apoyo a los estudiantes que residen en la residencia estudiantil Livia Gouverneur, quienes fueron desalojados por orden de la administración de Nicolás Maduro para establecer un centro de tratamiento para pacientes de COVID-19 en el edificio.

Yáñez alegó que los ataques en su contra por parte de simpatizantes y medios oficialistas han ido en aumento desde que salió de la planta televisiva y ha recibido amenazas en redes sociales que van desde la agresión verbal hasta afrentas a su integridad física y a su familia.

La corresponsal también agregó que fue víctima de amenazas e intimidación por parte de la Policía de Caracas mientras realizaba sus labores informativas el jueves 29 de julio. Ella y su camarógrafo fueron parados en un punto de control de PoliCaracas en la avenida Francisco Fajardo, a la altura de La Yaguara, en el municipio Libertador, y dijo que el funcionario se mostró hostil desde el momento en que se identificaron como prensa española.

El agente le exigió a los trabajadores de la prensa que le mostraran el material que tenían en la cámara mientras amenazaba a Yáñez con acusarla de terrorismo si encontraba algo que no fuera de su agrado. Le recordó que la pena para ese delito son 30 años de cárcel y expresó que los corresponsales extranjeros solo vienen al país para “publicar mentiras”. El equipo reporteril pudo seguir su camino después de la revisión. Ningún material fue borrado o decomisado.

IPYS Venezuela rechaza los hechos de intimidación y las amenazas conferidas contra Yáñez por el ejercicio de sus labores informativas. Ningún trabajador de la prensa debe verse limitado, bajo ninguna circunstancia, en el desarrollo de su trabajo reporteril, sobre todo cuando los temas son de interés público.

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