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Balance IPYSve | Venezuela: territorio desconectado

  • Solo en septiembre IPYS Venezuela documentó 26 casos de fallas de estructura y servicios que afectaron la conectividad de ciudadanos, medios de comunicación y periodistas en los 23 estados del país y el Distrito Capital

  • Las conexiones fijas y móviles siguen manteniéndose entre las peores posiciones de velocidad de acuerdo con el índice global Speedtest, que ubicó a Venezuela en la casilla 136 de 138 naciones analizadas para las conexiones móviles, como consecuencia de su promedio de velocidad de descarga ubicado en 7,68 mbps

  • De acuerdo con los principios fundamentales de la universalidad de internet de la Unesco, el Estado venezolano continúa violando los derechos sociales, económicos y culturales de la población al no garantizar el acceso a Internet efectivo y eficiente

Apagones eléctricos, cortes de fibra óptica y robo de equipos fueron las principales causas de los períodos prolongados de desconexión que ocurrieron durante el mes de septiembre en Venezuela. En todo el territorio las deficiencias en los servicios de telecomunicaciones se han vuelto un escenario común que continúa afectando especialmente la velocidad y la conectividad a internet de los ciudadanos, medios de comunicación y de los periodistas, quienes no pueden difundir ni acceder a información de interés público de forma oportuna. 

Preocupa que ante estas fallas de conexión las empresas de telecomunicaciones, públicas o privadas, ofrecen poca o nula información sobre las causas de las interrupciones de sus servicios, panorama que deja a los ciudadanos con la incertidumbre sobre si estos períodos de desconexión son momentáneos o permanentes.

Solo durante el mes de septiembre el Instituto Prensa y Sociedad de Venezuela (IPYS Venezuela) registró 26 casos de fallas de estructura y servicios que han afectado la conectividad en los 23 estados del país y el Distrito Capital en al menos una ocasión. Cuatro de estas incidencias se originaron por cortes de fibra óptica; dos por robo de equipos; siete por causas desconocidas; 13 fueron causa de apagones eléctricos, fluctuaciones en el voltaje, cortes de luz y deficiencias generales en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN), de los cuales en uno resultó directamente afectado un medio de comunicación.

Estos hechos representan solo una parte de la realidad nacional recabada a través de las denuncias ciudadanas y de la Red de Corresponsales, además de los observatorios especializados debido a que la exactitud, frecuencia y duración de este tipo de limitaciones son difíciles de determinar.

Organizaciones internacionales como Freedom House, también han expuesto esta situación en su análisis sobre Venezuela que señala que la crisis que atraviesa la nación “ha causado el deterioro de la infraestructura de telecomunicaciones y del país y, por ende, de la calidad del acceso a Internet. La infraestructura adolece de fallas, es objeto de robos y vandalismo, lo que resulta en caídas frecuentes del servicio y deficientes velocidades de conexión”.

Incluso sin fallas de estructura y servicios, la conexión a internet en Venezuela no es óptima para el teletrabajo y el telestudio. De acuerdo con Freedom House, algunos analistas señalan que la demanda de conectividad en el país supera la oferta, situación particularmente evidente durante la cuarentena por la COVID-19.

Según el índice global Speedtest de la empresa de diagnóstico de internet Ookla, en septiembre de 2021 la velocidad de sus conexiones fijas ubicaron a Venezuela en el puesto 131, en una lista de 181 países del mundo, con un promedio de carga y descarga de 19,70 y 23,92 megabits por segundo (mbps), respectivamente. Mientras que las conexiones móviles mostraron un promedio de 4,53 mbps de carga y 7,68 mbps de descarga, ubicando al país en el puesto 136 de 138 naciones analizadas.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), el internet “también es una red de interacciones y relaciones sociales y económicas que ha demostrado su potencialidad en materia de derechos humanos, empoderamiento de individuos y comunidades, y como facilitador de desarrollo sostenible”. 

Este organismo establece que los cuatro principios fundamentales de la universalidad del internet se resumen en las siglas DAAM y que a su vez incluyen otras categorías: que el internet se basa en derechos humanos (marco legal, libertad de expresión, derecho de acceso a la información, libertad de asociación y el derecho a participar en la gestión de asuntos públicos, derecho a la privacidad y derechos sociales, económicos y culturales); que sea abierto (marco legal, normas abiertas, mercados abiertos, contenidos abiertos, datos abiertos y gobierno abierto).

Además de que sea accesible para todos (conectividad técnica y geográfica, la asequibilidad de las redes y los servicios, cuestiones relativas al acceso equitativo, el contenido y la lengua, y capacidades y competencias); y que cuente con la participación de múltiples partes interesadas (gobernanza nacional, internacional y regional de internet); todo bajo una mirada de los indicadores transversales referentes a los temas género, niños y niñas, desarrollo sostenible y ética, confianza y seguridad en internet.

Medios sin energía eléctrica

Las deficiencias en la electricidad regularmente tienden a dificultar no solo las comunicaciones sino el desempeño de los medios informativos en todo el país. Esta restricción constante que enfrentan televisoras, emisoras radiales, diarios, portales digitales y demás plataformas implica que tengan que contar con reguladores de voltaje y plantas eléctricas, sin que eso garantice plenamente que podrán tener equipos protegidos o generar energía para mantenerse operativos ante imprevistos en el flujo de corriente.

En la isla de Margarita, en el estado Nueva Esparta, han sido reiteradas las restricciones eléctricas que afectan las comunicaciones y el trabajo de la prensa. En agosto de 2021 IPYS Venezuela reportó que medios de comunicación en la entidad insular se han visto afectados por un plan de racionamiento energético iniciado en 2020 y que desde junio de 2021 ha presentado interrupciones del servicio sin explicaciones por parte de las autoridades responsables.

Una muestra de la recurrencia de estas incidencias es la total inestabilidad de las telefónicas Movistar, Digitel y Movilnet, sumado al servicio ABA de CANTV en la isla, en medio de fluctuaciones en el voltaje, de acuerdo con reportes del 3 de septiembre de Ana Carolina Arias, corresponsal de IPYS Venezuela.

Hacia el occidente del país, en el estado Falcón, otro medio de comunicación fue afectado directamente por fallas del SEN. Una fluctuación eléctrica, ocurrida el miércoles 15 de septiembre alrededor de las 5:00 p.m., seguida por un apagón, dejó fuera del aire al único canal con señal abierta en la entidad,  A1TV, al quemar el modulador del transmisor.

Héctor Beaujon, director de la televisora, contó a IPYS Venezuela que previamente A1TV estuvo fuera del aire desde el sábado 23 de agosto hasta el viernes 3 de septiembre por la pérdida de varios componentes de su transmisor, quemados como consecuencia de las variaciones del voltaje.

Beaujon explicó que a causa del incidente iniciado en agosto perdieron cuatro de los cinco módulos que contiene el transmisor de televisión. De 5000 kilovatios (kW), lograron seguir trabajando con solo 300 kW luego de que técnicos que llevaron desde el estado Zulia y Caracas realizaran la reparación por un costo superior a los 1000 dólares.

Pero el incidente energético con más entidades afectadas al mismo tiempo ocurrió el domingo 12 de septiembre, cuando se generaron apagones y bajones de luz en diversos estados del país tras la explosión de un transformador de 100 megavoltios amperios (MVA) en la subestación eléctrica Santa Cruz, ubicada en el municipio José Ángel Lamas del estado Aragua. Esto causó la caída de la conectividad a nivel nacional a 70% de sus valores normales.

De acuerdo con el reporte del observatorio VE sin Filtro a través de su cuenta en Twitter, entre los estados más afectados se encontraron Miranda, que registró una caída hasta el 57% de sus valores habituales, Mérida (63%), Táchira (66%), Distrito Capital (73%) y Zulia (76%), y en menor medida, Amazonas, Apure, Aragua, Barinas, Carabobo, Cojedes, Falcón, Guárico, Lara, Monagas, Nueva Esparta, Portuguesa, Trujillo, Vargas y Yaracuy, totalizando 20 entidades con limitaciones de conexión que afectaron a los ciudadanos.

A través de los datos recolectados por la herramienta del observatorio Fing Internet Alert, IPYS Venezuela además comprobó que, durante el 12 de septiembre, el servicio de internet de CANTV sufrió cinco caídas calificadas por la aplicación como considerables, sucedidas entre horas de la madrugada hasta iniciada la noche en el siguiente orden: 02:30 a.m. (41,81%); 03:40 a.m. (42,12%); 02:50 p.m. (33,30%); 04:20 p.m. (34,17%); y 07:20 p.m. (33,50%).

En horas de la noche, el ministro de Energía Eléctrica, Néstor Reverol, informó a través de una llamada telefónica al canal del Estado Venezolana de Televisión (VTV), que el SEN había sido víctima “de un nuevo ataque terrorista” en la subestación Aragua.

Dos días después, el 14 de septiembre, Gregoria Díaz, corresponsal de IPYS Venezuela, reportó que desde la explosión del transformador los municipios José Ángel Lamas, Libertador y Sucre del estado Aragua quedaron sin electricidad y sin conectividad de la operadora Digitel. También informó que el servicio telefónico de los proveedores Movistar, Movilnet y la estatal CANTV era intermitente, al igual que el internet.

La falla eléctrica del 12 de septiembre también ha afectado de manera continua al estado Falcón, cuyos residentes han vivido en medio de apagones diarios y prolongados que afectan las conexiones desde entonces.

De acuerdo con información de Irene Revilla, corresponsal de IPYS Venezuela, el gobernador del estado Falcón, Víctor Clark, dijo que la Planta Termoeléctrica Josefa Camejo, ubicada al suroeste de la entidad, había sufrido daños que no se podían reparar porque no se consiguen los repuestos por el “bloqueo”. Según reseña una nota del diario Nuevo Día, el mandatario notificó que las fallas en el SEN ocasionaron la salida de una de las turbinas de la planta, perdiendo entre 130 y 140 milivoltios (mV).

Sin embargo, en Venezuela las fallas de energía de gran magnitud no son las únicas que interfieren en el funcionamiento de las telecomunicaciones. Casi a diario las constantes interrupciones del servicio eléctrico perjudican de manera directa o indirecta las conexiones y las labores de los medios de comunicación. Bajo este panorama Apure y Zulia fueron dos de las entidades con más episodios de inestabilidad en la conectividad por cortes eléctricos registrados durante el noveno mes del año. 

El jueves 2 de septiembre, en la región llanera, María Eugenia Díaz, corresponsal de IPYS Venezuela con base en San Fernando, reportó que usuarios de Movistar en el municipio Achaguas del estado Apure denunciaron la caída del servicio telefónico y de datos móviles desde alrededor de las 9:00 a.m. Trabajadores de la operadora contaron a Díaz que dos motores fallaron, uno por falta de batería y el otro, al quedarse sin refrigerante, por el cese del suministro eléctrico desde el 25 de agosto en Corozopando, estado Guárico, por donde pasa la señal. 

Una situación similar ocurrió cuatro días después, el lunes 6 de septiembre, también en Achaguas, cuando ciudadanos denunciaron haber permanecido sin servicio telefónico y de datos por tres días. En esta oportunidad, trabajadores de la operadora informaron a IPYS Venezuela que la caída de la señal, que también afectaba al municipio Muñoz, se debió a daños en los radios ubicados en el sector Los Algarrobos, municipio Biruaca, causados por una descarga eléctrica que quemó varios equipos. El servicio fue restablecido el 7 de septiembre en parte de Achaguas, para ese momento faltaba reponerlo en El Samán y Mantecal, municipio Muñoz.

Tres semanas más tarde, el lunes 27 de septiembre, entre las 11:00 a.m. y las 6:00 p.m. se registraron cuatro interrupciones del servicio eléctrico en el Bajo Apure que generó intermitencias en la señal de la operadora Digitel. No hubo pronunciamiento oficial sobre la situación. Fuentes de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) informaron a Díaz que el evento ocurrió por una avería en la línea La Horqueta-Calabozo, al sur del estado Guárico.

Mientras tanto, en el Zulia, que atraviesa una crisis energética desde hace casi 11 años, durante el mes de septiembre se registraron al menos dos episodios de apagones eléctricos que afectaron la conectividad en la región.

El primer caso ocurrió el domingo 19 de septiembre. Johanny Pernía, periodista corresponsal en la región, informó que al menos siete municipios del estado Zulia fueron afectados por un apagón de horas que afectó los servicios de internet. La electricidad y la conectividad se restablecieron alrededor de las 5:30 p.m. A las 5:32 p.m., Corpoelec anunció a través de su cuenta de Twitter que trabajadores recuperaron “el sistema en la subestación Tablazo-Cuatricentenario, logrando energizar las subestaciones Palito Blanco y Trinidad”, y que se mantenían las maniobras para recuperar la carga en los sectores afectados en la entidad zuliana.

El segundo caso se registró menos de una semana después, el sábado 25 de septiembre, cuando la conectividad se vio afectada por continuos bajones y apagones eléctricos desde horas de la madrugada. Pernía reportó que, tras varias fluctuaciones durante la tarde, comenzaron los apagones generales. A las 8:40 p.m., algunos sectores comenzaron a reportar el restablecimiento del servicio, mientras que otros anunciaron que se quedaban sin luz. A través de un tuit publicado a las 9:22 p.m., Corpoelec notificó que empezaba a restablecerse progresivamente el sistema eléctrico en la Costa Occidental del Zulia gracias a labores de sus trabajadores.

Por su parte, el gobernador de la entidad zuliana, Omar Prieto, señaló a través de un tuit que la situación en la región se debió a un acto de saboteo, pues en su comentario se refirió al evento eléctrico y agregó “Por más que saboteen, NO PODRÁN CON NOSOTROS!!!” (sic).

Hacia el oriente venezolano, en el estado Monagas, Ronny Rodríguez, corresponsal de IPYS Venezuela, reportó el 14 de septiembre que hubo una avería en la línea 230 KV entre las subestaciones El Furrial-El Indio que dejó sin luz a al menos 11 municipios de la entidad, hecho que afectó las conexiones telefónicas.

Incomunicación ciudadana

Los cortes de fibra óptica, daño y robo de equipos de telecomunicaciones también se han vuelto una constante que perjudica la difusión de información en Venezuela. Estas acciones, en la mayoría de los casos perpetradas por la delincuencia organizada, suelen afectar a más de un estado a la vez, y en ocasiones se trata de localidades con desiertos informativos. 

El 3 viernes de septiembre, usuarios del servicio de internet de CANTV manifestaron la caída del servicio en el estado Falcón a través de Twitter. Irene Revilla reportó que comerciantes del municipio Zamora denunciaron que llevaban tres días sin este servicio. No existen pronunciamientos oficiales al respecto, pero las denuncias ciudadanas a lo largo del mes de septiembre a través de redes sociales indican que el déficit se ha vuelto recurrente en la entidad.

Al día siguiente, el sábado 4, en el estado Apure, se reportó la caída del servicio de internet de CANTV desde alrededor de las 10:00 a.m. hasta las 9:16 a.m. del domingo 5 de septiembre. En este caso tampoco hubo información oficial de las causas ni de la avería.

De igual manera, durante septiembre IPYS Venezuela registró al menos cuatro casos de corte de fibra óptica a CANTV que representaron interrupción de la conectividad para los usuarios del servicio, tres veces a nivel regional y en una ocasión, en varias zonas del territorio nacional.

El 21 de septiembre, el observatorio VE sin Filtro reportó la caída de la conectividad en varios estados del país ocasionada por una falla de CANTV registrada desde las 2:30 a.m. Las entidades más afectadas fueron Táchira (49% de conectividad normal), Delta Amacuro (51%), Apure (54%), Trujillo (64%), Barinas (65%), Cojedes (67%) y Aragua (70%). De acuerdo con la información publicada por CANTV a través de su cuenta en Twitter, la falla fue causada por un triple corte de fibra óptica que afectó a varias regiones del país.

En un hecho más reciente, ocurrido el 23 de septiembre, los usuarios de CANTV en zonas del oriente del país estuvieron incomunicados. Corresponsales de IPYS Venezuela reportaron desconexión a través del servicio ABA de CANTV en Bolívar y Monagas. El observatorio Fing Internet Alert confirmó que la red se vio perjudicada 27,82%.

Un día después, el 24 de septiembre, CANTV informó, nuevamente a través de su cuenta en Twitter, que su servicio de internet presentaba fallas en localidades de los estados Anzoátegui, Monagas, Bolívar y Delta Amacuro como resultado del corte de fibra óptica por un acto de vandalismo.

Algunos de estos estados habían sido previamente afectados por daños en los componentes de la operadora estatal. El 6 de septiembre se reportó un corte de su fibra óptica al sur del estado Monagas que afectaba a Delta Amacuro. Posteriormente, el 15 de septiembre, se reportó la desconexión de ABA en Tucupita, en Delta Amacuro, debido a un corte a 58 kilómetros desde la Central Tucupita, sentido Temblador, al sureste del estado Monagas. En ninguno de los dos casos hubo información por parte de la estatal.

Mientras tanto, en Sucre, la corresponsal Nayrobis Rodríguez reportó que zonas residenciales y comerciales de Cumaná, capital del estado, estaban padeciendo desconexión en los servicios telefónicos de forma reiterada desde principios de septiembre, como consecuencia del hurto de los cables que asistían de estos servicios a los apartamentos del complejo Gran Mariscal y de las urbanizaciones Riberas del Manzanares y Barrio Sucre.

Posteriormente, habitantes de 10 comunidades de Cumaná protestaron frente a la sede de CANTV el 14 de septiembre por las múltiples fallas de los servicios que ofrece la empresa y por el robo de cables presuntamente por trabajadores de la operadora y Corpoelec. Según la información suministrada al equipo de IPYS Venezuela, algunas de las zonas afectadas fueron Bolivariano, Cascajal Viejo II, Río Viejo, Riberas del Manzanares, Las Palomas, Brasil y Barrio Sucre.

Los proveedores de telefonía e internet privados en Venezuela no están exentos de sufrir averías que interrumpan sus servicios. A través de la red de corresponsales de IPYS Venezuela, esta organización tuvo conocimiento de tres casos en septiembre, uno en el estado Sucre y dos en Portuguesa, en los que la señal de una o más operadoras privadas presentó deficiencias.

En Sucre, se reportó la caída del servicio de internet de la empresa Inter en el estado el 6 de septiembre. En esta oportunidad no hubo pronunciamiento de la operadora. 

También el 6 de septiembre, pero en el estado Portuguesa, se reportó la caída total de los servicios de la telefónica Movistar desde la noche del 5 de septiembre. En este caso la empresa tampoco emitió información oficial al respecto.

Portuguesa se vio afectado nuevamente el 17 de septiembre, cuando las señales de las telefónicas Movistar y Digitel amanecieron caídas en el estado llanero. Un agente autorizado de Movistar en Guanarito, al sur de la entidad, informó a Bianile Rivas, periodista de IPYS Venezuela, que la falla se debió a un corte de fibra óptica que también afectó al estado Barinas.

Si bien las fallas de conectividad en el país forman parte de un escenario que se ha normalizado por la frecuencia en que ocurren, tal realidad no deja de ser de gran preocupación para la población, sobre todo en medio del contexto de crisis sanitaria de la COVID-19 y las medidas de confinamiento que se mantienen activas luego de más de 18 meses de iniciada la pandemia en el país.

La emergencia sanitaria mezclada con la crisis económica y la falta de inversión en el sector de telecomunicaciones ha aumentado las zonas de desconexión y de desiertos informativos en Venezuela. Para gran parte de la población se ha hecho cuesta arriba ejercer sus derechos a través de los espacios digitales y el resto de sus actividades son condicionadas a los momentos en que cuentan con el suministro eléctrico.

De acuerdo con los indicadores establecidos por la Unesco referentes a los principios fundamentales de la universalidad del internet, en Venezuela, como producto de las fallas de conectividad, se han visto afectados los derechos de libertad de expresión, acceso a la información, libertad de asociación y el derecho a participar en la gestión de asuntos públicos, además del resto de los derechos sociales, económicos y culturales, coartando el libre desempeño de la sociedad.

IPYS Venezuela reitera su llamado al Estado venezolano de atender la grave crisis eléctrica y de conectividad que se vive en el país. También invita a los prestadores de los servicios de internet a que, de forma transparente y pertinente, informen a la población sobre las fallas o limitaciones en el desempeño de sus servicios. La educación, el acceso a la información, entre otros derechos humanos están siendo gravemente vulnerados frente a la inacción del Estado y de las empresas privadas de telecomunicaciones.

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