IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
El 18 de mayo de 2016, periodistas de medios de comunicación que se encontraban cubriendo la marcha convocada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) vieron obstaculizada su labor entre gases lacrimógenos y limitaciones de acceso a funcionarios públicos por parte de las fuerzas de seguridad estatal.
Alicia De La Rosa, periodista del diario El Universal, relató a IPYS Venezuela que junto a un grupo de periodistas le fue impedida su labor durante la cobertura informativa de una marcha convocada por sectores de oposición para exigir celeridad en el proceso para activar el referendo revocatorio contra Nicolás Maduro, presidente de la República Bolivariana de Venezuela.
La periodista explicó que acompañó a las personas que marcharon de Plaza Venezuela hacia la estación del Metro, cercano a la Torre La Previsora, donde un grupo de señoras mayores reclamaban a los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), cuerpo de seguridad del Estado, por el levantamiento de un cordón de seguridad en el lugar.
Las personas que pedían paso hacia la Avenida Libertador de Caracas rompieron el cerco de seguridad. Los funcionarios policiales no permitieron que los reporteros intentaran tomar declaraciones de los representantes políticos de oposición y los civiles que formaban parte de la actividad.
“Yo caminé con una colega hasta el elevado de Mari Pérez y poco después los funcionarios militares comenzaron a lanzar bombas lacrimógenas contra los manifestantes. Vi a varios colegas afectados por el gas en la Avenida Andrés Bello. Aunque la actitud de las fuerzas fue agresiva, un policía se acercó a nosotros y le explicamos que estábamos cumpliendo con nuestro trabajo”, dijo.
Aseguró que durante la cobertura, también estuvo en compañía de reporteras de las televisoras Venevisión y NTN24, el impreso El Nuevo País y el portal web, Bloomberg.
IPYS Venezuela también tuvo conocimiento de la herida que tuvo Eva Gemsh, periodista que estaba haciendo cobertura de la marcha para la TV pública alemana ARD, cuando un proyectil de bomba lacrimógena cayó en su cabeza. Miembros del equipo reporteril que se encontraban con la periodista, le acompañaron a la Santiago león, centro asistencia de salud, donde le suturaron la herida.
Uno de los compañeros de la reportera aseguró que los manifestantes también les impidieron realizar su labor a varios reporteros, pues no creían que cumplieran funciones para los medios de comunicación social.
En la ciudad de Barinas, funcionarios policiales señalaron e intentaron detener a Pedro Francisco Rojas, reportero que cumple funciones informativas para el concejal José Luis Calderón.
Rojas relató a IPYS Venezuela que luego de entregar un documento a las fuerzas de seguridad, con el fin de exigir celeridad a las autoridades regionales del Consejo Nacional Electoral (CNE), fue señalado por varios funcionarios policiales cuando se encontraba en una panadería. “Ellos me reconocieron por el parche que tengo en el rostro. Me agarraron por un brazo, pero la gente no dejó que me llevaran”, dijo.
El reportero admitió sentirse desconcertado por la cantidad de mensajes que ha recibido en sus redes sociales, luego de ser alcanzado por proyectiles de perdigón en el rostro y varias parte del cuerpo, el 11 de mayo pasado.
Esta alerta a la libertad de expresión representa una limitación de acceso a la cobertura de asuntos de interés público por parte de ciudadanos y funcionarios policiales.
El derecho a la libertad de expresión y el derecho a la información se encuentran consagrados en los artículos 57 y 58 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, los cuales establecen que toda persona tiene derecho a la comunicación libre y plural sin censura.
Cabe destacar que el numeral 5 de la Declaración de Principios sobre libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA) establece que la presión directa e indirecta sobre cualquier expresión, opinión o información difundida, a través de los medios de comunicación, debe estar prohibida con la ley.
