IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
Luis Alejandro Borrero
Carabobo.- En la tarde del 31 de agosto de 2016, aproximadamente a las 6:20 p.m., efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), cuerpo de seguridad del Estado, retuvieron a Sara Pacheco, periodista del periódico regional El Carabobeño; y le obligaron a borrar material fotográfico de su teléfono, mientras reportaba una manifestación en un mercado local por alimentos.
Las personas le daban golpes a las paredes del supermercado en el sector La Campiña, del municipio Naguanagua, aproximadamente a 122 kilómetros al oeste de Caracas. Pacheco cuenta que las personas exigían que les vendieran productos básicos tras más de una hora y media de esperar en cola. La comunicadora sacó su teléfono móvil para fotografiar la manifestación.
La reportera hizo fotos dentro y fuera del comercio. “Cuando iba saliendo se me acercaron dos guardias”. Ambos efectivos militares: uno de la GNB y otro de la Milicia Nacional Bolivariana. Los uniformados retuvieron a la periodista y le advirtieron que estaba prohibido tomar fotos. “Yo me identifiqué como reportera. Y les dije que sabía perfectamente que tomar fotos no estaba prohibido”. A pesar de su argumentación, los dos hombres le pidieron a Pacheco que les acompañara hacia dentro del supermercado.
Los efectivos no agredieron verbalmente a la reportera. Pero la retuvieron mientras buscaban a uno de sus superiores. “El teniente nunca llegó. Y para dejarme libre tuve que mostrar mi teléfono y borrar las fotos que había hecho, no solo desde afuera del mercado sino dentro”. La retención fue muy breve, duró menos de 10 minutos, pero únicamente porque la reportera decidió eliminar el material voluntariamente. “Esta es la primera vez que me sucede algo así”.
La detención momentánea de Pacheco representa un uso abusivo del poder estatal. Se enmarca como un hecho de censura. Se violaron los bienes de la reportera a través de un ataque a sus herramientas de trabajo.
Con este episodio, el Instituto Prensa y Sociedad (Ipys) registra al menos ocho alertas a la libertad de expresión en Carabobo desde el 1 de enero hasta el 31 de agosto de 2016. También se registran al menos 29 ataques contra herramientas de trabajo de periodistas.
La Constitución de Venezuela, en sus artículos 57 y 58, contempla la libertad de expresión como un derecho fundamental. Los ciudadanos pueden buscar, recibir y difundir información que sea de su interés a través de los medios de comunicación, sin que se establezca censura.
