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Periodista de televisora comunal fue agredida por manifestantes

El 20 de octubre de 2015, manifestantes persiguieron e intimidaron a periodistas que intentaron hacer una cobertura periodística en la Plaza de la Moneda de Barquisimeto, capital del estado Lara. La periodista de LaraTV, Katrina Kosarek’, fue agredida por una mujer corpulenta, quien le partió su cámara. Un grupo de mujeres ofrecería declaraciones en relación con 29 muertes maternas que han ocurrido en el Hospital Central Antonio María Pineda durante este año. El hecho ocurrió a las 9:00 de la mañana.

A los minutos de comenzar las declaraciones con las representantes de una mujer y familiares de las fallecidas, un grupo de personas se acercaron al lugar y empezaron a vociferar improperios en contra de las declarantes y de los periodistas presentes, según informó Katrina Kosarek’, camarógrafa de la Televisora Comunal LaraTV.

En vista de la situación de tensión, quienes ofrecían las declaraciones prefirieron retirarse a la sede del Inces Lara, a pocas cuadras del lugar. Pero los manifestantes los siguieron, contó Kosarek, y al momento que la vieron grabar la concentración, una mujer corpulenta le agarró la cámara y la partió, luego la tomó por el cuello, pero ella logró zafarse y correr hacia adentro del instituto educativo. A la reportera le dieron un golpe con su propio micrófono.

“Eran trabajadores de la gobernación del estado Lara, del Hospital Central”, afirma. Denuncia que los empleados del centro de salud recibieron un mensaje de texto el día anterior que decía: “Urgente, mañana concentración frente al Consejo Legislativo 6:00 am, por instrucciones del Gob. Henri Falcón, fundamental tu apoyo! Sin uniforme. Te esperamos”.

Jennifer Peña, corresponsal de Radio Nacional de Noticias en Lara, también fue testigo de la agresión, y detalló que las personas además de las groserías, lanzaron piedras en contra de todos quienes estaban presentes al momento de la rueda de prensa. Indicó que a otros camarógrafos les obstaculizaron su trabajo.

El artículo 57 de la República Bolivariana de Venezuela establece que toda persona tiene derecho a expresar libremente sus pensamientos y opiniones a viva voz, por escrito o mediante cualquier medio de expresión sin que pueda establecerse censura.

Las declaraciones agraviantes con fines intimidatorios, así como las presiones directas o indirectas, que pretenden silenciar la labor de los comunicadores sociales violan los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión, de acuerdo con los principios 9 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos.

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