viernes , abril 26 2024

Reporteros permanecieron detenidos tres horas en una estación del Metro de Caracas

  • Zambrano calificó de absurda la detención perpetrada por Héctor Idrogo, gerente de operaciones, cuando registraban tomas de apoyo. En compañía de funcionarios del Sebin, Idrogo obligó a los reporteros a borrar el material registrado

Zambrano calificó de absurda la detención

La periodista Daniella Zambrano y el camarógrafo William Madera, de la televisora NTN24, y el camarógrafo de Telemundo, Felipe Izquierdo, fueron detenidos en la Estación del Metro Chacaíto por Héctor Idrogo, gerente de Seguridad y Operaciones, junto a un grupo de presuntos trabajadores del Metro de Caracas. Los reporteros grababan tomas de apoyo para un trabajo periodístico acerca de una actividad política realizada por líderes de oposición ese 15 de junio en los vagones del metro de la ciudad capital en contra de la constituyente.

A las 8:30 AM culminó la actividad. Los reporteros de NTN24 y Telemundo grabaron el testimonio del alcalde de El Hatillo, David Smolanski, en las afuera de la Estación del Metro de Chacaíto. La periodista y los dos camarógrafos ingresaron y bajaron las escaleras para hacer tomas de apoyo de la afluencia de personas que salían por los torniquetes del sistema, pero cuando se disponían a grabar, alrededor de 30 personas con camisas rojas los abordaron exigiéndoles que apagaran los equipos, con gestos intimidatorios.

La periodista Daniella Zambrano vio que una sola persona estaba identificada con un carnet como Héctor Idrogo, gerente de Seguridad y Operaciones del Metro de Caracas, quien dijo a la periodista que no tenía autorización para grabar en las instalaciones del sistema.

Ante los señalamientos, los reporteros intentaron retirarse sin las imágenes, pero Idrogo se los impidió acusándolos de haber cometiendo un “delito en flagrancia” Zambrano rechazó el argumento del trabajador, quien les advirtió que funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) acudirían a Chacaíto para llevárselos detenidos.

Por los parlantes de la estación Chacaíto ordenaron a los usuarios desalojar las instalaciones. Los presuntos trabajadores con camisa roja comenzaron a amedrentar aún más a los camarógrafos. En ese momento, Zambrano les pidió apagar los equipos –que seguían registrando los hechos- y pidió a Idrogo que apartara a las personas del lugar antes que agredieran a sus compañeros. “Nos acusaron de registrar los videos que los diputados realizaron durante su actividad política dentro de los vagones”, dijo.

Los tres reporteros fueron llevados a una oficina dentro del sistema donde esperaron la llegada de los funcionarios en compañía de Idrogo y cinco personas.

Un motorizado de la cadena Telemundo esperaba a los reporteros en pauta cuando vio a todos los usuarios salir del sistema y, posteriormente, a trabajadores que cerraron los accesos superficiales de la estación. Cuando se dio cuenta de que los reporteros continuaban adentro, se comunicó con varios colegas y trabajadores de medios para alertar esta irregularidad.

Representantes gremiales, periodistas, reporteros gráficos y ciudadanos comenzaron a concentrarse en Chacaíto para exigir la liberación de los reporteros, a quien no se les permitió hacer llamadas ni recibir apoyo legal ni gremial en las tres horas que permanecieron privados arbitrariamente de su libertad por funcionarios del Estado venezolano, sin competencia alguna para ejecutar medidas de detención. La información se hizo viral en las redes sociales. Organizaciones no gubernamentales en materia de libertad de expresión comenzaron a exigir la liberación inmediata de los tres reporteros.

Funcionarios del Sebin ingresaron al sistema Metro  registraron los datos a los reporteros y les pidieron mostrar el material registrado. “Ellos se dieron cuenta que no había alguna grabación relacionada con las acusaciones formuladas. Solo había entrevistas”, dijo Zambrano.

Idrogo insistió severamente en que el material debía ser eliminado. La periodista considera que la petición del funcionario del metro responde a que no podía existir evidencia alguna del amedrentamiento sufrido en las instalaciones del Sistema Metro Caracas, y que sí había sido grabado y que, no obstante, tuvieron que borrar.  

A las once y media de la mañana liberaron a Zambrano, Madera e Izquierdo. Una concentración los esperaba afuera de la estación, donde la periodista declaró a la prensa lo sucedido. Zambrano calificó de absurda la detención y considera que el problema pudo haberse resuelto con una llamada a la sala de redacción de NTN24 Venezuela y la corresponsalía de la cadena Telemundo en el país.

En el marco de protestas opositoras sostenida en Venezuela, el Sistema Metro Caracas ha suspendido los servicios de trenes y metro bús en todas las líneas del sistema con el argumento de proteger al personal y las instalaciones.

Aun así, sectores de oposición se han concentrado y movilizado a pie,  en vehículos particulares o transporte público por la ciudad de Caracas con puntos de destino específicos en los últimos 75 días de protesta.

Este hecho  representa una detención arbitraria vinculada a una limitación de acceso a la cobertura de asuntos de interés público y, por ende, una medida de censura. El hecho involucra a trabajadores de una institución que cumple un servicio público. La detención contra los reporteros de NTN24 Venezuela y Telemundo vulnera los principios constitucionales establecidos sobre libertad de expresión y derecho a la información.

El Sistema Interamericano de Derechos Humanos establece en la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión que los hechos intimidatorios, amenazas y destrucción del material periodístico violan los derechos fundamentales de las personas y coartan severamente la libertad de expresión. Es deber de los Estados investigar estos hechos.

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