IPYS Instituto Prensa y Sociedad Venezuela
Los cuatro periodistas ingresaron al recinto educativo y fueron abordados por un grupo de 30 encapuchados
San Cristóbal.- El 09 de marzo de 2016, los periodistas Rafael Urdaneta Rojas y Fabiola Niño de El Venezolano TV; René Méndez de NTN24 y Manuel Cardozo de Ecos del Torbes fueron convocados por un grupo de estudiantes de la Escuela Técnica Industrial (ETI) para que reseñaran audiovisualmente a un grupo de estudiantes que habían sido heridos por perdigones, producto de manifestaciones que desarrollaban desde tempranas horas.
Según narró Urdaneta, uno de los agredidos, los cuatro periodistas ingresaron al recinto educativo y fueron abordados por un grupo de 30 encapuchados, aproximadamente.
A René Méndez y Manuel Cardozo los separaron de Fabiola Niño y Rafael Urdaneta. A Urdaneta le intentaron arrebatar la cámara y por no dejársela quitar le dieron una patada en la pierna derecha por parte de un presunto estudiante de la ETI.
Posteriormente, la periodista Fabiola Niño fue acosada, empujada y agredida verbalmente por un grupo de cinco personas que exigían la identificación de los profesionales de la comunicación social.
René Méndez y Manuel Cardozo fueron obligados a subirse a una mesa y los amenazaron con “lincharlos”, al mismo tiempo que también les solicitaban los carnets de sus respectivos medios de comunicación.
“Mientras fueron separados los periodistas, todos recibieron empujones y golpes en la espalda, además de gritos y agresión verbal, amenaza de muerte y amenaza de linchamiento. Posteriormente, y gracias a la mediación de un docente del cual se desconoce el nombre, los agresores accedieron a dejarlos salir de las instalaciones de la ETI. El secuestro duró aproximadamente 20 minutos, con amenaza de encerrarlos y no dejarnos salir por un tiempo más prolongado”, narró Urdaneta.
Al salir del edificio, los periodistas tuvieron que emprender veloz carrera, puesto que los agresores reunieron rocas y fueron lanzadas contra ellos y la Policía del Táchira, que tuvo que responder con escudos y perdigonazos para replegar a quienes lanzaban las piedras.
Esta alerta a la libertad de expresión representa un hecho de agresión física con fines intimidatorios, dada la amenaza de “linchamiento” y muerte. También constituye una situación que atenta contra la integridad física de los periodistas y trabajadores de medios de información ante la retención por cuestión de 20 minutos.
Los derechos a la libertad de expresión y a estar informados se encuentran contemplados en los artículos 57 y 58 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. La normativa nacional establece que los ciudadanos tienen el derecho de expresar sus ideas y opiniones, así como el de buscar, recibir y difundir información que sea de su interés, a través de cualquier medio de comunicación, sin que pueda establecerse censura.
Los hechos de intimidación, amenaza, secuestro y asesinato a los comunicadores sociales, así como la destrucción de sus materiales de trabajo, violan los derechos fundamentales de las personas y coartan gravemente la libre expresión, así lo establece el numeral nueve de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA).
