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Alerta IPYSve | John Carlin: mi objetivo al viajar a Venezuela siempre fue buena voluntad

Contar su experiencia y relatar parte de las historias vividas con Nelson Mandela en Sudáfrica, y los anécdotas en Irlanda del Norte, Colombia y Ruanda, era el objetivo del periodista y escritor inglés John Carlin en su visita a Venezuela. Un viaje que lo trasladó desde Madrid, España hasta la ciudad de Caracas, pero que tras una restricción del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) en el aeropuerto internacional Simón Bolívar de Maiquetía, fue catalogado como “inadmitido” y deportado en el mismo avión en que había llegado horas antes el lunes 7 de octubre.

Carlin, en una entrevista para el Instituto Prensa y Sociedad (IPYS Venezuela), destacó que su objetivo al viajar al país siempre fue de buena voluntad. “Yo iba sin ninguna prescripción. Sin noción de dar mi opinión sobre lo que la gente tenía que hacer. Simplemente iba a dar mis conocimientos”, pero al llegar a territorio venezolano, funcionarios del Saime le impidieron el acceso alegando que el periodista no cumplía con el perfil de turista y que debía poseer un visado especial porque estaría presentando conferencias que correspondía a un trabajo remunerado, afirmaciones que fueron refutadas por Carlin quien en dos ocasiones expresó a uno de los funcionarios que no venía a Venezuela “para ganar un peso”.

“Nadie me estaba pagando nada por lo que estaba haciendo, yo estaba dispuesto a dar mi tiempo, y mi tiempo es lo más valioso que tengo. Absolutamente gratis. Y simplemente por intentar ayudar”, destacó el también corresponsal para el medio The Independent en Sudáfrica entre 1989 y 1995, quien presentaría el foro “Mandela y el camino a la paz, horizontes posibles para Venezuela” organizado por el Instituto para las Transiciones Integrales (IFIT, por sus siglas en inglés) el miércoles 9 de octubre en la ciudad de Caracas.

En un comunicado el equipo organizador señaló que encontraron “inexplicable esa decisión toda vez que invitamos al sr. Carlin para promover los valores de tolerancia y la importancia de la negociación para resolver conflictos a la luz de su experiencia en Sudáfrica y su amistad con Nelson Mandela”.

Carlin destacó que en su estadía en Venezuela tenía previsto conversar con varios grupos y representantes, tanto de oposición como del gobierno, y si bien se tenía conocimiento de un encuentro con el ministro de relaciones exteriores, Jorge Arreaza, “no estaba pactado oficialmente”, por lo que desconocía si se llevaría a cabo o no.

Sobre el caso venezolano, el columnista de medios como El Clarín de Argentina y La Vanguardia y El País de España, señaló que aunque existan “personajes en determinados lados del conflicto que piensen que lo que está pasando en Venezuela es absolutamente sui generis, sin precedentes, que la cultura y la historia de su país marca una diferencia con cualquier otro lugar, es mentira” porque cualquier conflicto de este tipo, está caracterizado por “la naturaleza humana de toda la vida. De miedos, de ambiciones, vanidades y egos, y al final es eso; aunque cada país tiene su idiosincrasia, su cultura y su historia, pero hay un alto porcentaje de cualquier conflicto de este tipo, en el que se aplican leyes universales humanas”.

La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó la acción ejecutada por el gobierno venezolano contra el periodista británico. El presidente del organismo internacional, Christopher Barnes, quien asumió el cargo el mismo lunes 7 de octubre, aseveró que la acción contra Carlin “subraya la falta de tolerancia y el desprecio del régimen de Nicolás Maduro por la discusión de ideas”. 

Estos obstáculos contra el autor del libro “Factor Humano”, se suma a los más de 430 hechos de restricciones a la libertad de expresión que ocurrieron en Venezuela, en los primeros nueve meses de 2019, según los datos del monitoreo de libertades informativas de esta organización. Esta acción corresponde al sexto caso de deportación de periodistas extranjeros durante el mismo año.

IPYS Venezuela rechaza las acciones ejecutadas contra el periodista John Carlin por parte de las autoridades estatales, así como las restricciones migratorias en contra de periodistas extranjeros que en distintas circunstancias han intentado ingresar a Venezuela.

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