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Conatel aupó la censura sobre temas que involucran a Hugo Chávez

  • La dependencia del Ejecutivo dio instrucciones a los ciudadanos para denunciar las cableras que difundieron la serie El Comandante, sobre la vida de Hugo Chávez

  • Las campañas de agravio con fines intimidatorios naturalizan la censura previa y promueven la inhibición de difusión de contenidos por temor a represalias oficiales

El 30 de enero de 2017, la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), dependencia ejecutiva que regula las telecomunicaciones en el país, criminalizó la difusión de El Comandante, una serie producida por Sony Pictures Entertainment y transmitida por el canal colombiano RCN, inspirada en la vida del ex presidente venezolano, Hugo Chávez. A través de una serie de tuits, Conatel pidió a los ciudadanos denunciar a los operadores de servicios de televisión por suscripción en el país que difundieran la señal del canal colombiano durante la transmisión de la serie. Estos mensajes luego fueron borrados de su cuenta en a Twitter @Conatel.

Con la etiqueta  #AquíNoSeHablaMaldeChávez, el ente regulador calificó de insulto la producción audiovisual y  dio instrucciones a los usuarios sobre la información que debían reseñar para elaborar sus denuncias: Ciudad, Cablera, Número de canal, Hora de transmisión y fotos de la pantalla.

Ante la difusión de estos tuits, las cableoperadoras dejaron de transmitir la señal de RCN durante sesenta minutos en horas de la noche.

Usuarios de la red social Twitter denunciaron el bloqueo de la señal del canal colombiano y difundieron capturas sobre lo que podía leerse en pantalla: “El canal RCN quedará fuera del aire por el lapso de una hora. Pedimos disculpas por las molestias ocasionadas”.

Este fue un mensaje difundido por una cablera del estado Táchira. Foto. Cortesía.

La salida del aire de RCN ocurrió varias horas después de que Conatel se sumara a la campaña Aquí no se habla mal de Chávez, promovida por el diputado Diosdado Cabello, primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) y conductor del programa televisivo Con el mazo dando, difundido por Venezolana de Televisión (VTV), principal televisora del Estado.

Durante la difusión del programa Con el mazo dando, el 25 de enero de 2017, Cabello aupó a representantes de ministerios, dependencias, instituciones y a los ciudadanos en general a formar parte de la campaña en memoria del ex presidente Hugo Chávez, y también ordenó que fuesen denunciadas las personas que no se sumaran a la iniciativa.

El mensaje fue replicado por Nicolás Maduro Moros, presidente de la República, quien anunció, durante la transmisión de su programa Los domingos con Maduro, el 29 de enero de 2017, el “contraataque con la verdad” respecto a hacerle frente a la serie  televisiva. Maduro cedió la palabra a Adán Chávez, ministro de Cultura, quien anunció el rodaje una película y una serie que, según él, relataría fielmente la vida del presidente fallecido.

Respecto a la salida del aire de RCN de las cableras, no se ha publicado alguna providencia administrativa, que prohibiera la difusión de contenidos, ni se conoció de algún exhorto oficial que Conatel hiciera a las cableoperadoras para no que difundieran la serie, como lo hizo con las narconovelas La reina del sur, en 2015, y El Capo, en 2016.

La serie El Comandante es una historia de ficción que relata la vida de Hugo Chávez, presidente de la República Bolivariana de Venezuela, fallecido a causa de un cáncer en 2013. De acuerdo a lo reseñado por el canal que transmite la serie en Colombia, RCN, “’El Comandante’ es una historia inspirada en la vida de Hugo Chávez un hombre de origen humilde quien con tan solo 44 años y contra todo pronóstico se convirtió en el líder latinoamericano más poderoso y controversial de su tiempo. Durante su gobierno controló a su antojo las reservas del petróleo más grande del planeta, desafió al primer mundo y logró sacudir como nadie a todo el continente”.

Campaña de agravio contra  El Comandante

Durante los últimos días, la cuenta oficial de Conatel y usuarios de la red social Twiter replicaron numerosos mensajes, que forman parte de la campaña a favor de la memoria de Hugo Chávez, con el ánimo de descalificar la serie audiovisua. También hubo menciones a las cuentas de Twitter de Nicolás Maduro, presidente de la República Bolivariana de Venezuela; Ernesto Villegas, ministro del Poder Popular para la Comunicación y la Información, y el diputado Cabello.

Andrés Eloy Méndez, director de Conatel, elaboró una serie de tuits acompañados de la etiqueta #AquíNoSeHablaMaldeChavez. En una de sus publicaciones aseveró: “La canalla mediática internacional no pudo ni podrá jamás con los ideales revolucionarios. Estamos en pie de lucha para defender la patria”.

La imposición de campañas de descalificación con fines intimidatorios naturaliza la censura previa e inhibe la deliberación pública por temor a represalias oficiales y, por ende, condicionan la programación de los prestadores de servicios de radiodifusión.

El numeral 13 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión prohíbe que se utilice el poder del Estado para castigar o premiar a periodistas o empresas de medios de comunicación a través de mecanismos administrativos, como la asignación arbitraria de frecuencias de radio y televisión. También establece que los medios de comunicación tienen el derecho de realizar su labor de manera independiente, y que cualquier presión directa o indirecta que pretenda silenciar su ejercicio informativo es incompatible con la libertad de expresión.

Los Estándares de libertad de expresión para una radiodifusión libre e incluyente de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) establecen, en su fase introductoria, que este derecho permite que las personas no solo pueden expresar sino “conocer distintas visiones del mundo (propuestas estéticas, morales, culturales, entre otras) y puedan formarse un criterio autónomo para escoger su propio plan de vida”.

En internet no pudieron esquivar la censura

En el transcurso del 31 de enero, usuarios de la red social Twitter difundieron mensajes sobre cómo ver El comandante. La cuenta de Twitter de Espacio Público, asociación civil que vela por la libertad de expresión y el derecho a la información en el país, enlazó unos de sus tuis al video Primer Capítulo 1 El Comandante, subido a la web por un particular desde su canal de Youtube.

El 1 de febrero, este canal subió un segundo capítulo que los venezolanos no tuvieron la oportunidad de ver, debido a que la plataforma de Youtube censuró ambos videos a partir de un reclamo interpuesto por Sony Pictures Entertaiment por presunto “incumplimiento de derechos de autor”.

Carlos Correa, director de Espacio Público, confirmó a IPYS Venezuela esta información, y aseguró que los venezolanos no tienen una opción clásica para poder ver la serie en la página web de RCN porque algunos contenidos no están disponibles para Venezuela. Por esta razón, el uso de VPN, como se creyó en un principio, no resuelve el problema.

“Conatel no procura proteger los derechos de Sony Pictures, sino que bloquea un contenido que ni ellos mismos han visto. Por otro lado, la acción de Sony, sobre derechos de autor, es cónsona con el interés gubernamental, y deja sin opciones a la gente para ver la serie”, explicó Correa.

TNT será la televisora encargada de difundir la producción de Sony Pictures en Latinoamérica, excepto en Venezuela. En declaraciones para el diario El País de España, Ángel Zambrano, vicepresidente de Contenidos y Sindicación de Turner, holding propietario de TNT, aseguró: “No ha sido nuestra decisión dejar de emitir El comandante en Venezuela. Desde que empezamos a negociar, Sony nos aclaró que los derechos para ese país no estaban en venta… Entiendo que han querido ser cuidadosos con las reacciones que el material pueda ocasionar en Venezuela y protegerse legalmente”.

Por los momentos, Sony Pictures Televisión no se ha pronunciado.

Estos hechos vulneran los preceptos constitucionales sobre libertad de expresión y acceso  a la información pública sin censura estipulados en los artículos 57 y 58. También vulneran el numeral 5 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión que prohíbe las presiones directas o indirectas sobre cualquier expresión, opinión o información difundida que obstaculice el flujo informativo y la libre circulación de ideas, a través de cualquier medio de comunicación social.  

En Venezuela se registró un antecedente sobre la censura impuesta en contenidos difundidos en Internet motivados a “incumplimiento de derechos de autor”. El 28 de diciembre de 2015, la plataforma de Youtube censuró un vídeo titulado Las bodas de los hijos de Rincón, una pieza audiovisual del portal digital, El Pitazo Informativo, en la que se hacía referencia a los familiares del empresario venezolano y contratista de instituciones estatales, Roberto Rincón, quien fue detenido tras una acusación por legitimación de capitales.

El consejo editorial de El Pitazo rechazó la medida y consideró que “Youtube censuró, sin base cierta y documental, información de estricto interés público. El presunto interés privado prevaleció sobre una información relativa a legitimación de capitales, corrupción y violación de derechos humanos en Venezuela”.

Para ese momento, IPYS Venezuela enfatizó sobre la consideración que organizaciones de libertad de expresión de América Latina hicieron en torno a que las fronteras entre la libertad de expresión y el derechos de autor, al honor y la vida privada son muy estrechas, y que una de las maneras de disipar este conflicto lo da la preeminencia al derecho que tienen los ciudadanos a informarse y a conocer los asuntos que son de interés público.

Reporteros Sin Fronteras ha dicho que “en una democracia”, los intermediarios que son las empresas de las plataformas de comunicación en Internet, “no son las responsables de mantener el equilibrio adecuado entre la protección de la privacidad y la libertad de expresión”.

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